Planeación, pieza clave para vacacionar

Mié, 13 Jul 2016
Por: Mtro. Abraham Isaac Vergara Contreras, coordinador de la Licenciatura en Contaduría y Gestión Empresarial del Departamento de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México
  • El periodo vacacional implica una serie de planes que incluyen aspectos personales, familiares, sociales y financieros (Foto: Pixabay)

Un año más de trabajo y el verano llegó. Solteros y casados, mochileros y turistas de lujo, estudiantes y profesionistas, se disponen a disfrutar de unos días de descanso, periodo ideal para “cargar las pilas” y olvidarse de la rutina y monotonía de la escuela, la universidad o el trabajo.

El periodo vacacional implica una serie de planes que incluyen aspectos personales, familiares, sociales y financieros. Lo más importante es que las vacaciones no se transformen en pesadilla, y se aprovechen al máximo, por lo que hay una serie de actividades que se pueden realizar para estirarlas lo que más se pueda y disfrutarlas.

En el ámbito social, lo primero es desconectarte de todas las obligaciones cotidianas. La empresa, el negocio, el equipo de trabajo, los clientes y los proveedores sobrevivirán tu ausencia; así que apaga la computadora portátil y el celular (utilízalo para sacar fotos y videos). El tiempo de compartir con familia y amigos ha llegado, lo más importante es pasar momentos de calidad con ellos, disfrutar una caminata por un parque, por una callejuela o en la playa, goza y ríe, deja el estrés en tu casa o mejor aún en tu lugar de trabajo.

En lo personal es momento de recuperar esa rutina de hacer un poco de ejercicio, seguro con ello lograrás una mejor salud, un humor distinto y una mejor concentración para cuando regreses a tus labores. También lee un buen libro o ve tus programas favoritos, esto permitirá una distracción completa de tus responsabilidades. Si puedes combinar el ejercicio y la lectura en un ambiente donde predomine la naturaleza seguramente los beneficios serán mayores.

En casa destina algunas horas para arreglar desperfectos, esto no suena lo más divertido, pero seguramente al ver que las cosas funcionan de manera adecuada el humor y la productividad de los siguientes meses mejorarán, ya que no sentirás más esa presión de cosas descompuestas.

En el tema financiero, el mejor consejo es la planeación. Haber determinado un presupuesto realista evitará dolores de cabeza durante el periodo vacacional y más aún después de él. Inicia considerando tres puntos básicos: el medio de transporte que se va a utilizar, definir el tipo de vacaciones que pretendes realizar (cultural, familiar o recreativo) y la comparación de precios.

Si la intención es salir de México es muy importante considerar el tipo de cambio de la moneda del país o países que pretendes visitar. Nos encontramos en una época de turbulencia en la que el pensamiento “el que convierte no se divierte” no debe pasar a segundo término.

Por ello sin importar el tipo de viaje que se realice, siempre se debe tener en mente la solvencia personal o familiar, la estabilidad financiera debe ser el eje rector, por lo que considerar algunos de los siguientes puntos puede favorecer el ahorro y no exceder el presupuesto planteado:

1. Dependiendo el lugar de destino seleccionado puedes contactar a amigos o familiares que vivan en la región. Así, por un lado ahorras en gastos de hospedaje y en tiempo para conocer más y mejor el lugar; y por el otro, el reencuentro con la persona que se estima.

2. En la medida de lo posible el viajar en auto, camión o tren permite conocer más lugares de manera independiente. Si tienes compañeros de viaje el auto es la mejor opción ya que los gastos se pueden reducir. Un ejemplo, dividiendo entre todos el costo de la gasolina, que como recordarás acaba de subir de precio.

3. No necesariamente debes dejar la ciudad de origen. Cuando lo que se plantea es disfrutar de las vacaciones en familia, ésta es una opción ideal para minimizar los gastos. Ser turistas en nuestra ciudad enriquecerá el conocimiento de lo que obviamos cada día; seguramente encontrarás lugares turísticos, centros de entretenimiento y museos a los que no has ido o hace mucho tiempo no visitas. También se pueden visitar lugares cercanos a la ciudad, es decir, realizar viajes de ida y vuelta, así el gasto en hotel se elimina.

4. Ya sea en tu ciudad o fuera de ella, en la actualidad con la información que existe en Internet puedes conocer promociones o actividades gratuitas. Que no te dé pena acercarte a un módulo de información turística o a los restaurantes y hoteles para saber qué descuentos ofrecen o cómo utilizarlos.

5. El tema bancario cobra importancia. De ser posible identifica las sucursales o cajeros del banco que utilizas para evitar el pago de comisiones, y en la medida de lo posible limita el uso de tarjetas de crédito. Una tarjeta de crédito no implica que tengas más dinero, implica que se pospone el pago de lo que estás disfrutando, por lo que es importante considerar fechas de pago, intereses y liquidez presente y futura.

6. Si evitas comprar recuerdos en zonas turísticas seguramente favorecerá tu bolsillo. Los precios sin duda serán más altos al comprar en los lugares donde lo hacen los turistas, y más si estos son internacionales.

7. Gran parte del dinero se va en hospedaje y alimentación, por lo que comprar con antelación paquetes todo incluido favorecerá las finanzas. Es conveniente dejar la comodidad en casa, pues la mayoría de las veces el hotel sólo se usa para dormir, por lo que una habitación limpia y con lo mínimo puede ser suficiente. Revisar las páginas en Internet de portales donde se ofrecen departamentos o casas en renta (día o semana) están en expansión, por lo que puedes, o bien rentar tu lugar y generar ingresos mientras no estás en casa, o bien aprovechar alojamiento barato y cómodo. En la alimentación, encontrar lugares alejados de los turistas favorecerá al ahorro; no pases hambre, pero tampoco necesitas comer en lo más exclusivo. Preparar ciertos alimentos por tu cuenta es una buena idea, utiliza los supermercados para comprar lo básico y tu gasto será menor.

Existen otro tipo de consejos que pueden ayudarte a planear tus vacaciones y controlar el gasto. Si eres viajero frecuente no olvides revisar los kilómetros o puntos con los que cuentas, así como los beneficios que has acumulado en tus tarjetas de crédito, sólo hazlo con tiempo para que no te lleves sorpresas.

Si vas a viajar en transporte aéreo y tu prioridad no es llegar de inmediato, una ventana de oportunidad es realizar vuelos con escalas (podrías conocer algo más) y en la medida de lo posible reservar vuelos ida y vuelta considerando los mismos puntos de origen y destino. Considerar el uso de aeropuertos de ciudades vecinas es una posibilidad para generar ahorro importante, y por qué no, conocer un poco más.

Una vez que hayas llegado a la ciudad o población que quieras visitar, camina o renta una bicicleta, harás ejercicio y podrás ver lugares que mucha gente que va en viajes turísticos se pierde. Sólo no olvides poner el candado a la bicicleta; todos son honrados hasta que se demuestre lo contrario.

Por último, tal vez no es tan divertido, pero si no se contó desde un principio con una planeación y presupuesto una opción es posponer tus vacaciones y aprovechar la temporada baja. Si eres flexible en tus deseos y fechas de vacaciones el precio realmente puede convertirse en tu aliado, además la afluencia de turistas es menor y podrás disfrutar de mejor manera el destino seleccionado, no es lo mismo ver La Gioconda con 10 personas que esquivando la cabeza y empujones de cien.

Disfruta tus vacaciones pero que tu contabilidad y finanzas personales no se vean afectadas.

prl/ ah

 

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