La Universidad Iberoamericana Ciudad de México rindió un homenaje al Dr. Luis Vergara Anderson, académico del Departamento de Historia, por sus 50 años ininterrumpidos en la IBERO.

En la ceremonia de homenaje, el Rector de la IBERO, Mtro. David Fernández Dávalos S. J., dijo que cuando tenía en mente abrir la Procuraduría de Derechos Universitarios en esta institución pensó en Luis Vergara como primera persona para encabezarla, porque daba el perfil de tener una absoluta e indiscutible calidad moral, valía humana, ser totalmente leal con la institucionalidad y la IBERO, y con don de gente.

Esto ejemplifica “la estima, el aprecio y la confianza que tengo por Luis desde hace muchos años que nos conocimos”, dijo el Rector sobre Vergara, a quien consideró “uno de los pilares importantes en la historia última de estos 50 años de una universidad que tiene 74”.

“Esto que hablo en primera persona lo sé de cierto que es una visión, una idea compartida que tenemos dentro de la Universidad respecto de Luis”; una persona que es apreciada por su calidad como ser humano, su calidad académica “y también por la idea de lo que un cristiano tiene que ser el día de hoy. Preocupado por lo que sucede en el mundo, ocupado por poner su granito de arena en la superación de las deficiencias que nos alejan de los valores del Evangelio y del Reino de Dios”.

Adrián Tolentino, a nombre de quienes son sus alumnos, comentó que son generaciones y generaciones de ‘otros’ que participan en la IBERO quienes tienen por ejemplo de virtud al Dr. Luis Vergara; de quien Adrián nunca dejará de admirar su constante preocupación por la ética, por el otro y por las personas. “Ninguno (maestro) me ha enseñado hasta ahora como tú que lo más importante es el bien que se debe hacer a las personas”.

“Pienso que no puedes demostrar mejor el amor que le profesas a la IBERO que con la encarnación que haces de los cimientos sobre los que está construida. Esto es, el respeto por la persona humana, la libertad de conciencia, la justicia social, la apertura, entre otros”.

Adrián agregó que no sólo el magisterio del doctor Vergara es modelo de imitación, sino también su persona en todas sus dimensiones. “El mejor homenaje a tu vida es sin duda seguir tu ejemplo”.

La maestra Melisa Esquivel, quien habló a nombre de los exalumnos, añadió: “La historia con Luis para muchos de nosotros se vuelve no solamente una historia de un profesor y sus alumnos, es una historia personal”. A ella, como a tantos, Vergara Anderson le ha enseñado que la empatía con los demás es uno de los aspectos más importantes para vivir felices.

Por su parte, el homenajeado dijo: “Se han dicho muchas cosas bonitas de mi persona. Yo sé que son más bien expresión de la benevolencia de quienes las dijeron; creyeron que hablaron de mí y realmente hablaron de sí. Algunas cosas, en un grado menor al expresado, pueden ser verdad. Pero yo les quiero decir: yo conozco algo de mis miserias, de mis limitaciones, de mis fallas, y sospecho que hay unas peores que yo mismo me niego a ver”.

Sin embargo, agradeció a sus hermanos presentes, a todos los que acudieron al homenaje y a su esposa Cristina Torales Pacheco, académica del Departamento de Historia de la IBERO, de quien retomó sus palabras cuando ella recibió la Medalla Ignacio de Loyola: "mi mayor agradecimiento es para la infinita bondad de Dios".

Sobre el Dr. Luis Vergara Anderson

Es ingeniero químico (por la IBERO y por la UNAM), maestro en Sistemas y doctor en Historia (ambos por la IBERO). Su tesis doctoral obtuvo el Premio Edmundo O’Gorman del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) por ser la mejor en el campo de la teoría de la historia e historiografía. Ha realizado estudios de posgrado en Desarrollo Humano. En 1996 ingresó a la Academia Mexicana de Ingeniería y es miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI).

De acuerdo con el Archivo Histórico de la Biblioteca Francisco Xavier Clavigero de la IBERO, en enero de este 2017 el Dr. Vergara Anderson cumplió 50 años de ingreso formal como profesor de tiempo completo de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, donde ha ocupado los siguientes puestos: profesor de la Escuela de Ciencias Químicas, director del Departamento de Matemáticas, director de la Maestría en Sistemas y director de Servicios Escolares, asistente para Asuntos de Posgrado de la Dirección General Académica.

Coordinador de Investigación, coordinador general de Planeación, director general de Planeación, profesor en el Departamento de Desarrollo Humano, director de Posgrado e Investigación, director del Departamento de Desarrollo Humano, profesor del Departamento de Educación y Desarrollo Humano, académico del Departamento de Psicología y académico del Departamento de Historia.

Texto y fotos: PEDRO RENDÓN/ICM