Aunque cada año más de 127 mil niños sufren quemaduras graves, no existe interés gubernamental en apoyar campañas preventivas al respecto, señaló Virginia Sendel de Lemaitre, presidente de la Fundación Michou y Mau para niños quemados, en su visita a la Universidad Iberoamericana.

Por ello, con el fin de contribuir a la misión de educar, concientizar y sensibilizar a los padres de familia sobre los riesgos que los niños corren en el hogar, un grupo de 20 estudiantes de la Licenciatura en Comunicación realizaron cinco propuestas de videos preventivos de accidentes relacionados con quemaduras.

Entre las propuestas presentadas a la fundación destacó la de Fernanda del Barrio, Daniela Castro, Lorena Díaz y Daniela de Winter, quienes realizaron un video que aprovechó las técnicas de stop motion y bodypaint para simular el proceso de una quemadura en una niña pequeña. El video puede ser consultado en este link.

La colaboración surgió como parte de un proyecto de vinculación entre los departamentos de Comunicación y de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana, y la Fundación Michou y Mau, señaló el maestro Guillermo Martínez Foullon, académico de la materia Administración de proyectos en comunicación.

A lo largo del periodo escolar, los universitarios recibieron retroalimentación para sus proyectos, por parte de especialistas de miembros de la fundación.

En la presentación de proyectos, Virginia Sendel lamentó que en México nunca se han realizado campañas de este tipo, pues en el país no es obligatorio que las escuelas primarias privadas impartan cursos de prevención obligatorios relativos al tema, además de que la Secretaría de Educación Pública no ha mostrado su interés en apoyar la prevención de este problema.

Si bien el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) calcula 127 mil niños quemados al año, la cifra no incluye las quemaduras derivadas de accidentes con electricidad, pirotecnia (cohetes) y tanques de gas, señaló Virginia Sendel.

La Fundación Michou y Mau para niños quemados traslada de forma gratuita a Estados Unidos un promedio mensual de ocho niños con quemaduras de gravedad que ponen en riesgo sus vidas. Esto se realiza por medio de un avión ambulancia, con un costo promedio de 15 mil dólares por niño, absorbidos por la fundación, que también cuenta con ocho unidades de quemados en el país, para atender casos de menor gravedad, añadió.

JTGI/ ah