Las estudiantes Sharon Fernández y Paola Zuart de la Universidad Iberoamericana participaron en el 'Encuentro de feminismos en la educación media superior y superior' que organizó el Comité Feminista de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

En el encuentro, que se realizó en la Casa Abierta al Tiempo, las jóvenes hablaron acerca del surgimiento de Mujeres IBERO, así como la labor que realiza la Comunidad de Representantes de Asociaciones Estudiantiles (CREA) de esta casa de estudios, que aglutina a 11 organizaciones estudiantiles de las cuales cuatro tocan los temas de género: Despierta, Sin trata, Unión de Mujeres Activistas (UMA) y Escucha.  

Durante su participación en las mesas de trabajo, la estudiante de Relaciones Internacionales, Paola Zuart, como representante de Despierta, expuso que la organización que preside reflexiona sobre temas de violación de derechos humanos en México. Mientras que Sin trata atiende tópicos de reinserción y apoyo a víctimas de trata. Escucha es para concientizar acerca de la violencia de género; mientras que UMA, de reciente creación, es una organización feminista.

La alumna de Ciencias Políticas y Administración Pública, Sharon Fernández, dijo que realizar estas actividades permite que la labor de las organizaciones universitarias no se quede sólo en el campus, sino que trascienda y pueda incidir en todo el país.

“Además de trascender, nos permite unirnos porque no tiene caso trabajar por separado, sino apoyarnos, por ejemplo, para que todas las universidades tengan un protocolo de género efectivo”, explicó Zuart.

En ese sentido, las alumnas destacaron el Protocolo para la Prevención y Atención de Violencia de Género, pues en otras instituciones educativas existen de corte burocrático y sólo generan un desgaste en la víctima.  

El 'Encuentro de feminismos en la educación' consistió en un diálogo en torno a las diferentes condiciones y experiencias que atraviesan distintas instituciones educativas. Se organizaron mesas de trabajo y ponencias que llevaban los nombres de quienes han sido víctimas de feminicidio, como un homenaje para no olvidarlas y que no pasen a ser un número más.

Valentina González/ICM