En el Distrito Federal no hay un reconocimiento del valor histórico de los edificios, monumentos y esculturas considerados patrimonio inmobiliario del siglo XX, los cuales se van a perder por estarlos destruyendo para levantar construcciones nuevas, consideró Louise Noelle Gras, historiadora del arte egresada de la Universidad Iberoamericana y presidenta de Docomomo México.

Ignorancia, falta de responsabilidad y definitivamente los intereses económicos, son las causas de la destrucción de los patrimonios inmobiliarios de la ciudad de México, explicó la titular de Docomomo, grupo abocado a la documentación y conservación del movimiento moderno en arquitectura.

Como a muchas personas no les interesa el valor del patrimonio arquitectónico urbano, son de gran importancia para crear conciencia sobre este tema las reuniones como el "VII Seminario anual Do.co,mo.mo_México. Usos, transformaciones y reciclajes del patrimonio moderno en México". Una revisión crítica de las intervenciones arquitectónicas y urbanas, realizada este 25 de abril de 2014 en la Ibero, a donde Noelle asistió como ponente.

Luego de impartir su Conferencia "Deformaciones y destrucciones de los monumentos del movimiento moderno en México", la historiadora dijo que en nuestro país una medida eficiente para proteger inmuebles valiosos y crear conciencia sobre su conservación fue que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) los declarara patrimonio de la humanidad, distinción recibida por el campus de Ciudad Universitaria de la UNAM y la Casa Luis Barragán (la que fuera residencia y estudio de dicho arquitecto).

Esa revaloración despierta el deseo de que otros inmuebles en México quieran ser protegidos como patrimonio de la humanidad, por ejemplo, la casa en Coyoacán donde vivieron el muralista Diego Rivera y su compañera, la pintora Frida Kahlo. En tanto que otras edificaciones, como el Museo Nacional de Antropología, han sido declarados patrimonio nacional, lo que también garantiza su defensa.

Nuevos uso de suelo ayudarían a conservar inmuebles patrimoniales

Otra forma distinta para conservar los inmuebles patrimoniales, que incluso allegaría ingresos económicos a sus propietarios, consistiría en darles un nuevo uso de suelo para transformarlos en restaurantes, museos, galerías, hoteles y hasta en departamentos, añadió la arquitecta Sara Topelson, vicepresidenta de Docomomo México.

Un cambio de esa índole (que se realiza en las zonas centro de muchas ciudades de Francia) restablece la vitalidad del edificio y de su entorno, siempre y cuando no se transforme la construcción y se mantenga la imagen urbana del lugar donde se localiza.

Asimismo, en una época actual en que los paseos ciclistas dominicales que el Gobierno del Distrito Federal realiza en diversas avenidas de la capital han sido bastante aceptados por muchos ciudadanos, Topelson opina que podría revivirse la costumbre que ella y el maestro Manuel Berumen Rocha -académico de la Ibero- tenían cuando impartían clases de arquitectura en los años 80: llevar a sus alumnos universitarios a recorridos en bicicleta para que apreciaran los inmuebles de la ciudad.

La dinámica permitía a los estudiantes tener una mirada desde una perspectiva distinta a la del coche, poderse detener frente al edificio que quisieran analizar, recorrer lentamente el magnífico proyecto urbano que es Ciudad Universitaria o disfrutar de un café en una plaza pública como la de Coyoacán, que en conjunto forman parte de la imagen y banda urbana de nuestra ciudad.

El "VII Seminario anual Do.co,mo.mo_México" fue organizado por el Departamento de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y Docomomo México. Participaron académicos y miembros de esas instituciones, además de los docentes de las universidades autónomas de San Luis Potosí, de Yucatán y de Nuevo León.

PRL/ ah