Decenas de alumnas de la Universidad Iberoamericana participaron en la protesta simultánea que llevaron a cabo distintas universidades privadas de la Ciudad de México en contra de los feminicidios.

Reunidas en la explanada principal, en punto de las 11:00 de la mañana de este lunes, estudiantes de esta institución educativa, realizaron un pase de lista para recordar a las mujeres que han sido asesinadas en nuestro país.

Al unísono, tras nombrar a cada una de las víctimas, las participantes gritaron “ni una menos”. Al terminar el pase de lista, con el puño en alto guardaron un minuto de silencio en memoria de quienes han sido víctimas de feminicidios en México.

Durante la consigna, Mariana Rojas Wah, vicepresidenta de Unión de Mujeres Activistas (UMA) de la IBERO y una de las organizadoras de esta protesta, habló de las 10 mujeres que serán asesinadas este 17 de febrero en el país, haciendo referencia a las últimas cifras de feminicidio que dio a conocer Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).

“Van a matarlas y nadie lo sabe, no sabemos dónde ni a qué hora pasará. Si de camino a la universidad mientras repasa mentalmente lo que vendrá en el examen del próximo martes; o si cuando salga del trabajo mientras trata de recordar si aún queda arroz en la despensa; o al recorrer los 35 metros que van de la parada al parque donde siempre se quita los audífonos y está alerta ante la poca luz que hay, en donde sabe que es mejor acelerar el paso. Nadie lo sabe, pero van a matarlas. Hay 10 mujeres de este país que hoy no volverán a casa. Es como un juego de lotería, nos podría tocar a cualquiera de nosotras”, compartió.  

Rojas Wah, expresó que las estudiantes continuarán manifestándose hasta que dejen de ser necesarias las marchas, las consignas, los performances, las denuncias, las veladoras, “en las calles queremos ser libres, no valientes. La IBERO está viva porque vivas nos queremos, porque a nosotras, la verdad sí nos hará libres”.

En respuesta al aumento de la violencia de género, alumnas que integran la comunidad IBERO buscan trasformar el dolor y el miedo que se vive con propuestas concretas para generar un diálogo constructivo y soluciones.

De tal manera que las estudiantes Paola Zuart y Ligia Delgado dieron lectura al pliego petitorio que está dirigido a las autoridades de este país a través del cual buscan eliminar la cultura machista y salvaguardar la seguridad de mujeres y niñas que viven en este país:

1. Incorporar en el programa de educación primaria y secundaria, así como en los libros de la SEP, la historia del feminismo
2. Invertir en programas de concientización social sobre el origen y las consecuencias de la cultura machista.
3. Sancionar la publicación y el lucro con imágenes de víctimas en redes sociales y medios de comunicación.
4. Abordar la violencia de género como una problemática interseccional que tome en cuenta las necesidades particulares y las diferencias de todas las mujeres que se encuentran en territorio mexicano.
5. Crear una fiscalía especializada en feminicidios y violencia de genero.
6. Garantizar la capacitación de los funcionarios públicos en prevención y atención a las denuncias sobre violencia de género para evitar la revictimización.
7. Sanciones a funcionarios públicos que, debido a faltas en el proceso, pongan en riesgo a las mujeres denunciantes de violencia.

Los colectivos feministas de la IBERO, el Colegio de México, el Centro de Investigaciones y Docencias Económicas (CIDE), el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey (ITESM), campus Santa Fe y la Universidad Anáhuac campus Sur y Norte se organizaron para realizar la protesta de forma simultánea.

La estudiante de Relaciones Internacionales de la IBERO, Mariana Rojas Wah, destacó el hecho de que las universidades hayan realizado esta protesta porque estas instituciones educativas son microcosmos que tienen réplica en la sociedad nacional y porque son formadoras de conciencia social.

“Como estudiantes de la Ibero contamos con una voz potente que tenemos y vamos a utilizar para visibilizar a quienes ya no están. La situación de feminicidios en México es como una casa que se incendia, no porque las llamas no hayan llegado a nuestra habitación significa que no tenemos que luchar por apagar el fuego. La lucha es por todas”, dijo.

Valentina González/ICM