La Universidad Iberoamericana y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) presentaron el Diagnóstico y recomendaciones sobre las políticas a favor de la lactancia materna en el lugar de trabajo, que evidencia las limitaciones en esta materia ante el desconocimiento de los beneficios de promover la lactancia materna en las empresas y porque se percibe como una práctica que involucra sólo a las mujeres.

El estudio, en el que participaron académicas e investigadoras del Departamento de Salud y del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (EQUIDE), ha identificado que la lactancia materna en el lugar de trabajo puede incrementar la eficiencia y productividad, y, a su vez, reducir el abstencionismo, ya que, entre otras cosas, las mujeres que amamantan suelen faltar menos al trabajo debido a que sus bebés enferman menos.

De acuerdo con la investigación, el apoyo para que las trabajadoras amamanten puede ahorrar a los empleadores dinero en el largo plazo, según evidencia de prácticas en otros países. Por ejemplo, en Estados Unidos, las empresas con un programa de apoyo a la lactancia materna ahorran un promedio de tres dólares por cada dólar que invierten. Además, ofrecer un programa de lactancia en el lugar de trabajo también ayuda a mantener una fuerza laboral estable, reduciendo la rotación de mujeres trabajadoras.

La Dra. Sonia Hernández Cordero, académica e investigadora del Departamento de Salud de la IBERO, señaló que este estudio es una de las primeras aproximaciones a nivel mundial que evalúa la implementación de una política para favorecer las prácticas de lactancia materna dentro del ámbito laboral, permitiendo identificar áreas de oportunidad para mejorar la política.

“El estudio utilizó metodología mixta y la participación de distintos actores, incluyendo colaboradores hombres, lo que da una perspectiva diferente, que ha sido poco abordada en estudios de lactancia.  Como resultado de la evaluación, se emiten una serie de recomendaciones, dirigidas a diferentes niveles, resaltando la importancia de reconocer que existen distintas formas de apoyar la lactancia en el lugar de trabajo. Se requiere una serie de acciones, implementadas en conjunto, para tener un mayor impacto en las prácticas de lactancia entre las mujeres trabajadoras”, explicó durante su intervención en el encuentro virtual con integrantes de la comunidad empresarial.

El estudio, cuyo objetivo principal fue identificar las áreas de mejora en las políticas a favor de la lactancia materna en el lugar de trabajo en México, arrojó que, en el país, el ejercicio de lactancia es diferente entre las mujeres que trabajan y las que no. La práctica exclusiva (es decir, cuando la leche materna es el único alimento que reciben las y los recién nacidos en sus primeros seis meses de vida) es de 10.8% entre las madres trabajadoras y de 15.6% entre las que no trabajan fuera del hogar.

Asimismo, la lactancia continua (la que se mantiene hasta los dos años) es de 8.5% para el primer grupo y de 16.8% para el segundo; mientas que el promedio de duración de la práctica es de 4.6 meses y 9 meses, respectivamente.

Durante la presentación virtual, el representante de UNICEF en México, Christian Skoog, dijo que promover la lactancia materna es una de las medidas más eficaces que puede adoptar un país para combatir la mala nutrición a lo largo de la vida y prevenir enfermedades crónico-degenerativas, como la diabetes tipo II y otras afecciones cardiovasculares.

Añadió que es esencial que se cumpla en el ámbito laboral la legislación que protege el derecho de las madres trabajadoras a amamantar a sus bebés, a través de permisos de maternidad remunerados, descansos durante la jornada laboral y espacios dignos para amamantar o extraer y almacenar la leche.

“La unión de esfuerzos es crucial en este proceso de lograr que toda trabajadora ejerza su derecho a amamantar a su hija o hijo. Si las empresas en México se comprometen con la implementación de estas políticas, contribuirán de manera crucial al desarrollo de una población más sana y próspera”, afirmó Skoog.  

La información se recolectó con metodología cuantitativa y cualitativa transversalizada por una lógica de género (método mixto), en empresas de los estados de Chihuahua, Jalisco, Nuevo León y Yucatán.

El estudio se centró en hacer un monitoreo de los avances de la implementación de las políticas de lactancia materna con base en las recomendaciones de la Guía para el fomento de una cultura de lactancia materna en los centros de trabajo: instalación y funcionamiento de salas de lactancia que UNICEF publicó en noviembre de 2018, en colaboración con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), la Secretaría de Salud (SS) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Las académicas e investigadoras de la IBERO que participaron en este estudio son:

• Dra. Sonia Hernández Cordero
• Dra. Mireya Vilar Compte
•  Dra. Mónica Ancira Moreno
• Mtra. Cecilia Pérez Navarro
• Mtra. Izchel Cosío Barroso
• Mtra. Isabel Ferré
• Mtra. Soraya Burrola Méndez
• Lic. Erika García Alberto
• Lic. Natalia Rovelo
• Mtra. Isabel Omaña
• Mtra. Vania Lara Mejía

Además, la UNICEF lanzó una campaña para promover espacios dignos para la lactancia materna y en especial en el trabajo: '¿Te gustaría comer o preparar tu comida en el baño? Entonces, ¿por qué las mamás y sus bebés deben hacerlo?'.

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Infográfico de espacios amigables para favorecer la lactancia materna en el trabajo

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Valentina González/ICM