Montserrat Valdivia Ramírez, alumna de la Maestría en Estudios sobre Migración de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, investigará, como parte de su tesis, la ‘Migración interna. Mujeres migrantes e inserción laboral en la industria de la construcción en la Zona Metropolitana del Valle de México’.

Eligió ese tema para obtener su título de posgrado al darse cuenta que mujeres mexicanas, procedentes de diversos estados de la República, están integrándose a trabajos en la construcción; lo que despertó su interés por conocer el perfil de estas mujeres y saber por qué se insertan laboralmente en ese sector, cuando lo habitual es que las migrantes internas se desempeñen como trabajadoras del hogar.

Los temas de mujeres, migrantes e industria de la construcción no son nuevos para Montserrat, toda vez que ha trabajado en ellos en diferentes etapas de su vida. En el ámbito académico, actualmente, colabora como asistente de investigación de la doctora Carla Pederzini Villarreal, docente del Departamento de Economía de la IBERO, quien entre sus proyectos de investigación tiene uno sobre personas indígenas que también trabajan en la construcción.

En su ejercicio profesional, como Licenciada en Trabajo Social, Montserrat ha brindado atención a migrantes internacionales en tránsito, y acompañamiento en procesos de reintegración social de mujeres que fueron víctimas de explotación sexual.

Es además coautora del Manual de Atención para Personas Deportadas (publicado para el Colectivo Deportados Unidos en la Lucha) y ganadora del Premio Gustavo Baz Prada 2015 (que otorga la Universidad Nacional Autónoma de México -UNAM-), por su proyecto ‘Fortalecimiento de las Políticas Públicas del Distrito Federal a favor de la población en Movilidad Humana’.

Debido a su trayectoria, y con el fin de profesionalizarse más, Montserrat Valdivia decidió cursar la Maestría en Estudios sobre Migración en la IBERO, para lo cual recientemente consiguió el apoyo financiero de la Beca Margaret McNamara Education Grants, a la que se hizo acreedora este 2019 por su interés en promover el bienestar de las mujeres y niños.

Una vez que tenga su grado de maestra, que espera conseguir en junio de 2020 luego de defender su tesis, a Montserrat le gustaría seguir trabajando con mujeres y niñas, pues entre las y los migrantes, ellas son quienes están en situación de mayor vulnerabilidad.

“Como soy trabajadora social, el trato directo con las personas es lo que más me gusta; y por eso creo que cuando sea maestra continuaré brindando asistencia y acompañamiento a las mujeres migrantes”, concluyó.

Texto y foto: PEDRO RENDÓN/ICM