El día de hoy la IBERO recibió con mucha alegría y emoción a las y los más recientes integrantes de la comunidad universitaria, con una invitación a que se hagan conscientes de la realidad que existe afuera para que se conviertan en agentes de cambio, que enciendan  la llama en sus corazones y que "hagan el mundo arder”.

Ante un auditorio lleno de jóvenes expectantes a punto de arrancar su vida universitaria y en el marco de la Ceremonia de bienvenida del Día B para estudiantes de nuevo ingreso en el semestre Primavera 2023, la estudiante de la Licenciatura en Diseño de Productos y Experiencias, Paola Cuevas, compartió la vivencia transformadora que ha experimentado en estos años en nuestra casa de estudios. Consideró que ha vivido un cambio totalmente abismal, “nunca me esperé que me hicieran reflexionar tanto sobre quién era yo”. Destacó que la IBERO nos vuelve “empáticos hacia las otras personas y hacia lo que está pasando allá afuera”, nos invita a salir y ayudar a la comunidad.

Y sin bien la Universidad Iberoamericana brinda las herramientas, el impulso, “la chispa para prender nuestra llama”, la joven llamó a sus compañeras y compañeros a tener la disposición para prender esta chispa y hacerla crecer. Además, les recomendó aprovechar la Universidad más allá de las clases, pues “la IBERO es muchísimo más: talleres, asociaciones y sociedades de alumnos, experiencias que nutren muchísimo”.

Por su parte, Emiliano Contreras, egresado de la Licenciatura en Comunicación y fundador de la casa productora Casa Raíz, agradeció la promoción de la diversidad que ocurre en nuestra IBERO CDMX. Si bien en otros espacios se trata de reprimir esa diversidad, relató, la IBERO nos prepara para “darnos cuenta de la realidad, no a reprimirla”. Como promotor de los derechos de la comunidad LGBTI+, destacó el arropamiento que recibió en nuestra IBERO CDMX durante su proceso de autodescubrimiento.

Asimismo, recomendó a las y los jóvenes “exprimir” a sus profesoras y profesores, que son personas muy capacitadas y muy involucradas en la industria, con una genuina intención de sacar lo mejor del alumnado.

El Dr. Luis Arriaga Valenzuela, S.J., Rector de nuestra IBERO, recordó a algunas egresadas y egresados destacados, y señaló que comparten un rasgo en común: la determinación de abrazar un camino de vida que los y las situó al servicio del otro, pues descubrieron que su verdadera inclinación era hacer arder al mundo con un fuego especial. Apuntó que la educación ignaciana de la IBERO encuentra su punto de partida en la vida de San Ignacio de Loyola, que dio un giro fundamental, mismo que puede ocurrir a cada integrante de nuestro alumnado: volcarse al servicio de una causa extraordinaria.

Invitó a las y los nuevos estudiantes a buscar su causa, las ideas que les apasionan, los temas de su interés, o las problemáticas que les preocupan. ¿Qué quieren hacer ustedes en la Ibero y con la Ibero para cambiar al mundo?

En su intervención, el Vicerrector, el Dr. Alejandro Anaya Muñoz, aprovechó para comentarles que en los próximos años van a pasar más tiempo aquí que en cualquier otro lugar, y “eso les va a dejar una huella, pues no van a ser los mismos dentro de cuatro años”.

Texto: Yazmín Mendoza. Fotos: Alberto Hernández