Consumo de marihuana en jóvenes provoca deterioro mental, alertan

Mar, 23 Oct 2018
Investigadores de la IBERO, UNAM y UAEM realizan la investigación 'El efecto de la inyección juvenil de cannabinoide sobre la expresión de receptores glutamatérgicos MDA'
La investigación arroja que el consumo temprano de este compuesto orgánico modifica el cerebro y se reorganiza de manera distinta
Hallan que el deterioro cognitivo es mayor si la actividad de los sujetos es "ociosa o poco compleja"
  • Dr. Oscar Galicia, coordinador de la Licenciatura en Psicología de la IBERO (Valentina González/IBERO).

El consumo de marihuana en jóvenes de entre 13 y 15 años puede provocar deterioro cognoscitivo, pues cuando se ingiere esta sustancia a una edad temprana se registra una disminución de hasta ocho puntos en el coeficiente intelectual.

Este deterioro cognoscitivo se corrobora en la investigación 'El efecto de la inyección juvenil de cannabinoide sobre la expresión de receptores glutamatérgicos MDA', realizada por académicos de la IBERO, la UNAM y la UAEM.

“El problema que hemos encontrado con nuestros estudios es que el consumo temprano de esta sustancia modifica el cerebro y se reorganiza de manera distinta. Esto no sorprende, es esperado, pero no se sabía cómo era el cambio. Ahora sabemos que el consumo temprano de marihuana produce un deterioro cognoscitivo que de acuerdo a otros estudios se agrava conforme pasan los años de consumo”, señaló el Dr. Óscar Galicia, coordinador de la Licenciatura en Psicología de la IBERO.

Los investigadores se han dedicado a estudiar el efecto que provocan los cannabinoides en cerebros en desarrollo, debido a que la edad de inicio del consumo oscila entre los 13 y 15 años. Sin embargo, cada vez es menor la edad pues hay quienes empiezan el consumo desde los 12 años, tal como ha ocurrido en los países que han legalizado la marihuana.

Asimismo, la investigación arrojó que el deterioro cognoscitivo es mayor si la actividad de los sujetos son ociosas, poco complejas, poco cerebrales. Pero si son activos, es decir, si piensan y resuelven problemas tendrán un ligero retraso, pero al final no impactará en su desarrollo cerebral.

El académico de la IBERO, quien durante su doctorado se integró a uno de los principales grupos de investigación que existe en México sobre este tema, platicó que para llegar a estos resultados experimentaron con ratas jóvenes, se les introdujo la sustancia y las dejaron en estado ocioso, lo cual modificó su cerebro de manera importante y perdieron capacidad cognoscitiva. Pero a las que pusieron en movimiento, en una tarea exigente, no modificaron el cerebro, pero sí tardaron más tiempo en aprender.

“Es como si el aprendizaje tuviera un efecto protector, como si la demanda de actividad cognoscitiva por sí misma fuera capaz de subsanar el deterioro que provoca la marihuana. Pero eso sólo se puede hacer si están pensando, resolviendo problemas, en el sillón no”, explicó Galicia.

El especialista aseguró que de acuerdo a varios estudios cuando esta sustancia se consume en edad adulta si bien existe disminución en el coeficiente intelectual de los consumidores, este déficit no es tan importante como cuando se inicia muy temprana la ingesta.

De acuerdo con Galicia, la marihuana contiene entre 80 y 100 cannabinoides diferentes, todos con efecto farmacológico. Es decir, hacen algo a nivel del cerebro o a nivel corporal de todo el sistema humano. De muchos de estos cannabinoides no se conocen los efectos en particular porque los usuarios normalmente los consumen ya que se encuentran en toda la planta, entonces muchos de ellos tienen efecto antiinflamatorio, analgésico, antiepiléptico o antipsicotrópico; pero si alguien busca un efecto analgésico no necesariamente necesita el antipsicotrópico.

Galicia aseguró que lo ideal es que nadie ingiera la sustancia. Sin embargo, es claro que hay un mercado de consumo, por lo cual es importante una legislación que lo evite en menores de edad; aunque recordó que esto no se ha conseguido con otras drogas legales como el alcohol. 

“El problema no está en la legalización sino en la implementación. La estructura de los servicios de salud que tenemos está sobresaturado y no podría atender el incremento en los casos de dependencia, pues por experiencias internacionales se sabe que aumenta alrededor del 10% cuando una droga es legalizada”, explicó.

Sin embargo, añadió que el sistema de salud no tiene la capacidad para tratar a las personas que tienen adicción a otras sustancias como el alcohol porque ha renunciado al tratamiento de las enfermedades, pues hay pocos centros, especialistas y capacidad, por esta razón las adicciones son manejadas por particulares.

“Para evitar que haya cada vez más adicción, desde hace mucho tendríamos que haber visto campañas de prevención por parte del gobierno. Se debería estar en escuelas primarias, secundarias y prepas con foros hablando sobre los efectos que causa el consumo de marihuana. Por lo contrario, se ha creado una expectativa del consumo, esperando que se legalice”, añadió.  

Hace unos días, Canadá autorizó el libre consumo y la producción de cannabis. Al respecto, durante una visita a Montreal, Marcelo Ebrard, quien será secretario de Relaciones Exteriores en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, aseguró que la legalización de la marihuana es una opción muy interesante a corto plazo para México.

Valentina González/ICM 

 

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