Con las próximas elecciones presidenciales en México, los ciudadanos están experimentando descontento y frustración por tres razones fundamentales: la primera, porque la gente está aburrida de los partidos políticos; la segunda, por la falta de capacidad y autocrítica de los líderes políticos; y la tercera, por los discursos vacíos de los gobernantes, señaló el Dr. Álvaro Rodríguez Tirado, académico del Departamento de Estudios Internacionales de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México.

“Existe un descontento y frustración generalizadas con respecto a los últimos resultados que nos ha dado la democracia en distintos países del mundo”, señaló Rodríguez Tirado durante la conferencia inaugural en Relaciones Internacionales 'La democracia y sus descontentos'.

En el caso de México, el descontento y la frustración que se tiene de cara a las elecciones presidenciales del próximo año se debe a que la gente está aburrida de los partidos políticos. Al respecto, el académico recordó los seis mil millones de pesos adicionales que les aprobó el Instituto Nacional Electoral (INE) para 2018.  

“El problema no es del INE, sino una determinación que viene de la Constitución. Pero el propio Congreso de la Unión es el que emitió esas leyes, es decir, los diputados y senadores de los partidos políticos. Estamos entrampados en esto de la partidocracia que ha dado resultados muy lamentables al punto de percibir a los partidos como negocios”, señaló Rodríguez.

El Dr. Álvaro Rodríguez Tirado, quien imparte la carrera Teoría Política II en la IBERO, explicó que los ciudadanos se sienten descontentos con respecto a los líderes políticos. “Frustra su falta de capacidad y de autocrítica”, enfatizó.

Por otra parte, el académico aseguró que los discursos políticos están absolutamente vacíos de contenido, pues a nadie les entusiasma y no inspiran a nadie.

“La política se está viendo como una cuestión de administración casi empresarial. Se trata de un discurso cuasi técnico de medios afines. Por eso nadie queda inspirado”, dijo.

El especialista puso como ejemplo la proliferación de empresas de seguridad privada para explicar cómo el Estado mexicano ha fallado, pues la seguridad después de ser de responsabilidad estatal ahora pasa al ámbito de mercado. “Ahora quien tienen mayor seguridad es quien la puede pagar. Con esto, la función esencial del Estado ya está privatizada”, aseguró.

Finalmente, el Dr. Álvaro Rodríguez señaló que la IBERO debe generar ciudadanos críticos.

Valentina González/ICM