De acuerdo con datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), las carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés) ofrecen salarios por encima del promedio nacional y tienen la menor brecha salarial, pero del total de personas que egresan de estos programas educativos en México, sólo 13.5% son mujeres. 

¿Qué retos enfrentan las mujeres en el ámbito STEM en nuestro país? Sobre ello nos hablaron la Dra. Patricia Amézaga Madrid, académica del Centro de Investigación en Materiales Avanzados (Cimav) y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) nivel II, la Mtra. Evelyn Pineda Tlapale, Directora de Transformación Digital de AT&T México, la Lic. Beatriz Díaz de León, Desarrolladora Java Sr de Bosh y la Mtra. Atzirit León, Gerente de Riesgos en TI de AstraZeneca, durante el conversatorio “El andar de la mujer por el mundo tecnológico, una experiencia personal”, organizado el 4 de octubre de 2023 por el Departamento de Física y Matemáticas de la Universidad Iberoamericana. 

Patricia Amézaga Madrid 

Unas horas antes del conversatorio, celebrado en el Auditorio Fernando Bustos de la IBERO, la ganadora del Premio Ada Byron a la Mujer Tecnóloga, Capítulo México, ofreció una conferencia sobre una nanopartícula que podría reducir costos en el tratamiento de aguas residuales, su mirada se iluminaba cuando explicaba cómo fue el desarrollo de su investigación; en contraste, durante la charla, en la que compartió la mesa con otras mujeres dedicadas al ámbito STEM, su rostro lucía pensativo mientras narraba que al terminar la licenciatura no encontró trabajo porque había sido mamá y para los empleadores “no cumplía el perfil”. 

Más tarde, sus estudios de posgrado tampoco le abrieron las puertas de las universidades en Chihuahua -estado en el que radica desde los 9 años- y durante mucho tiempo se desempeñó como perito criminalista, hasta que su actual jefe, quien era su profesor en el doctorado, le dio la oportunidad de colaborar en el Centro de Investigación en Materiales Avanzados (Cimav). Actualmente, la Dra. Patricia Amézaga es miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), nivel II, cuenta con siete títulos de patente (uno internacional y seis nacionales) y ocho patentes en trámite (una internacional, una mundial y seis nacionales).  

Sin embargo, con el humor y la simpatía que la caracteriza, menciona un desafío que aún enfrenta en su carrera científica: “A pesar de los logros, todavía tengo una plaza como técnica académica y estoy luchando por una de investigadora, yo espero como el príncipe Carlos, que a los 75 años llegó a ser rey, que algún día la obtenga, tengo 53, aún hay esperanza”. 

Evelyn Pineda Tlapale 

Su delgada y pequeña figura atraviesan la puerta del Auditorio, la firmeza de los pasos que la encaminan a la mesa donde se reúne con las otras tres invitadas, ya dan muestra de la seguridad en sí misma que la ha llevado a ser la Directora de Transformación Digital de AT&T México, pero el camino no ha sido fácil, muy joven tuvo que dejar su natal Tlaxcala para cumplir su sueño de estudiar Ingeniería en Telecomunicaciones y Electrónica en el Instituto Politécnico Nacional (IPN): “fue muy complejo porque yo no traía el background técnico que tenían casi todas y todos mis compañeros que venían de una vocacional”. 

“Me esforcé muchísimo, tenía que quedarme más tiempo para estudiar, pedí asesorías para poderme poner al mismo nivel, pero antes de terminar el primer semestre no sólo los alcancé, ahora ayudaba a mis compañeros”, recuerda la Mtra. Evelyn, quien menciona “en mi salón, el 35% éramos mujeres y los tres primeros promedios los tuvimos nosotras, lo cual me da mucho orgullo porque es una carrera que se piensa que es para hombres, ahora, esas tres mujeres tenemos posiciones de liderazgo en empresas que nos reconocen y apoyan nuestro crecimiento”.  

Beatriz Díaz de León 

La suavidad de su voz y sus gesticulaciones delicadas hacen inocultable la sensibilidad y empatía que forman parte de la personalidad de la Desarrolladora Java Sr de Bosh, aunque se trata de cualidades altamente valoradas en la mayoría de los entornos, en los trabajos STEM aún hay muchos prejuicios: “En mi primera entrevista laboral, era recién egresada e iba un poco nerviosa, me hicieron la evaluación técnica, luego entra el manager del proyecto con una actitud intimidantes y me pregunta ‘oye Bety, ¿lloras?, me imagino que como eres mujer lloras mucho y te advierto que aquí vas a llorar más porque este equipo está conformado por hombres, el ritmo de trabajo es demandante, trabajamos hasta tarde y los fines de semana’”.

Su mirada luce nostálgica mientras dice “claro que logró intimidarme, mi estancia en el proyecto fue corta porque continuamente resaltaban ‘es que como eres mujer haces esto’ y en ese momento no tenía la seguridad en mí misma para levantar la voz”, recuerda la Lic. Díaz de León quien no quiere que las nuevas generaciones de ingenieras pasen por esto y piensen que está bien, asimismo invita a otras profesionistas a ser empáticas: “Las mujeres somos parte fundamental en el avance tecnológico, debemos apoyarnos entre nosotras porque tristemente, muchas veces las propias mujeres nos ponemos el pie y no sólo recibimos estos stoppers por parte de los hombres, entonces generemos redes de apoyo, participemos en iniciativas que tengan nuestras empresas sobre inclusión de género”. 

Atzirit León 

Escucha a sus compañeras del conversatorio y sus ojos se achican como haciendo un check mental de las veces que le ha sucedido lo mismo, la manera en la que comparte su experiencia -que no ha sido muy diferente a la de las otras invitadas- nos deja ver que nunca para, siempre va por más, ese tesón y ese deseo de superarse siempre así misma la han llevado a ser Gerente de Riesgos en TI de AstraZeneca. “Cuando entré a sistemas, de un grupo de 20, sólo seis éramos mujeres y ¿cuántas creen que terminamos? El 100% porque somos muy capaces, de eso no hay duda”, señala la Mtra. Atzirit. 

Sin embargo, apoyando lo descrito por las demás invitadas a la mesa, señala que es muy importante prepararse, certificarse, pero también señalar situaciones de injusticia que quizá no son evidentes para los compañeros hombres; por ejemplo, mencionó que su primer trabajo todas las mujeres debían vestir tacones y cierto tipo de ropa, pero ella daba soporte en sistemas y debía caminar mucho, ir por equipos, levantar cables y decidió alzar la voz, habló con su jefe y le explicó por qué era inviable esa regla y a partir de esa charla se cambió.  

Asimismo, señaló que en su actual empleo, en una junta un compañero comentó “haces tal cosa como niña” y la Mtra. Atzirit reaccionó: “hice una pausa y le dije, lo que acabas de hacer no es correcto, es ofensivo, de forma muy educada le expliqué por qué y creo que no debemos juzgar, es mejor educar con empatía porque yo lo conozco, le tengo aprecio y sé que no lo hizo conscientemente, más adelante, pudimos platicar y él entendió mi punto y me agradeció que se lo hubiera señalado”.

Para terminar el conversatorio, las cuatro invitadas reflexionaron sobre la importancia de fomentar la seguridad en las niñas y mujeres jóvenes que están interesadas en estudiar carreras STEM, ¿tú también cursas un programa de ciencia y tecnología? Comparte tu opinión en nuestras redes sociales.  

Por: Laura Herrera Camarillo.  

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