La equidad de género es, desde hace siglos, una asignatura pendiente en el desarrollo de la ciencia. En la actividad astronómica contemporánea, la accesibilidad a equipo especializado suele ser determinante para obtener hallazgos de alto valor. Sin embargo, el tiempo de uso de telescopios de alto rendimiento ha presentado sesgos de género plenamente documentados.

Uno de los equipos de alta tecnología que generado mayor impacto en la historia de la humanidad es el telescopio espacial Hubble. En el 2014, fue publicado un estudio en el cual se muestra que el apoyo para propuestas de tiempo de uso de este telescopio a cargo de varones tuvo un índice de aprobación significativamente mayor que sus contrapartes femeniles¹.

Por esta razón, las autoridades correspondientes adoptaron en 2018 un sistema de arbitraje anónimo enfocado en el contenido científico de las propuestas, omitiendo información específica sobre género y trayectoria personal de cada proponente². Como consecuencia de las medidas implementadas, los proyectos elaborados por mujeres superaron la tasa de aprobación varonil por más de medio punto porcentual. Este resultado positivo motivó a la NASA para adoptar una medida idéntica en todos sus telescopios especializados que ha entrado en vigor de manera inmediata³.

Esta decisión también favorecerá el desarrollo de proyectos ambiciosos, pero bien fundamentados, en el ámbito de la astronomía actual. Un ejemplo de ello es el estudio de la estrella KIC 8462852, mejor conocida como la estrella de Tabby, la cual se encuentra en la constelación del cisne y presenta variaciones muy inusuales en su brillo.

La astrónoma Tabetha Boyajian tuvo que realizar una colecta independiente para estudiar el fenómeno debido a la carencia de apoyos por parte del establishment astronómico del momento. Significativamente, esta campaña de recolección de fondos fue un gran éxito, pues en poco tiempo se reunieron más de 100 mil dólares aportados por mil 762 patrocinadores independientes⁴. Cabe hacer notar que hasta el momento aún no se cuenta con una explicación absoluta sobre el origen del comportamiento inusual del brillo de esta estrella.

El problema de la inequidad de género en la ciencia mexicana atraviesa una fase muy delicada⁵, pero éste puede ser trabajado con medidas semejantes a la recientemente adoptada por la NASA. El acceso a las jefaturas de instalaciones de alta especialidad en las ciencias físicas nacionales ha registrado avances, pero éstos aún son insuficientes. Más aún, es necesaria una nueva cultura desde la infancia que permita garantizar facilidades y ambientes aptos para realizar labores científicas con plena equidad ⁶.

Referencias:

1 Reid, I. N.  “Gender-Correlated Systematics in HST Proposal Selection”

   Publ. Astron. Soc. Pac. 126, 923–934 (2014).

² G. Guglielmi,”Gender bias goes away when grant reviewers focus on the science, but female scientists suffer when the research proposals are judged primarily on the strength of the CVs”, Nature 554, 14-15 (2018). https://www.nature.com/articles/d41586-018-01212-0

³ A. Witze, “NASA changes how it divvies up telescope time to reduce gender bias”, Nature News, July 3^rd, 2009 https://www.nature.com/articles/d41586-019-02064-y  

⁴ Los detalles del fondeo independiente para investigar la Estrella de Tabby pueden consultarse en la dirección electrónica:  www.kikstarter.com/proyects/608159144/the-most-mistirious-satar-in-the-galaxy.

⁵ E. Rodriguez Mega,” ‘I was dying of shame’: Mexican Science faces its #MeToo moment”, Nature 671, 13-14 2019. https://www.nature.com/articles/d41586-019-01376-3

⁶ A. Sandoval-Villalbazo, “Persiste sesgo de género en ciencias físicas”, Prensa Ibero, 17 de octubre de 2017.  https://ibero.mx/prensa/analisis-persiste-sesgo-de-genero-en-ciencias-fisicas

PRL/ICM