Las economías retomarán el rumbo cuando se resuelvan los problemas logísticos, la carestía de insumos y la falta de personas trabajadoras calificadas en puertos. Esto ocurrirá cuando se vaya controlando la pandemia y se convierta en una situación endémica como lo ha sido la influenza u otros problemas de salud, señaló el Dr. Pablo Cotler Ávalos, académico del Departamento de Economía de la IBERO.

De acuerdo con el investigador de la IBERO, si no se solucionan estos componentes económicos, vamos a seguir viviendo con miedo e incertidumbre. En el caso específico de la inflación, ésta seguirá afectado los precios y el aparato productivo no logrará recuperarse en este contexto pandémico.

“Controlar la pandemia es fundamental, sin ello no podemos recuperar el sistema productivo, incluso provoca seguir viviendo con una presión psicológica, porque sigue persistiendo el miedo que llega a paralizar. En la medida en la que se alcance este control, las economías empezarán a crecer nuevamente y la dinámica de precios tenderá a ser menor”, dijo el académico.

Cotler explicó que la producción de varios insumos se detuvo en 2020 con la llegada de la pandemia, pues muchas industrias tuvieron que limitar sus producciones; mientras que en 2021, de manera súbita, la vacuna anticovid provocó que los consumidores demandaran productos. Esta combinación hizo que los precios subieran.

En este sentido, se tiene una mayor demanda y, a su vez, una menor oferta en momentos en los que las empresas y productores tienen la necesidad de recuperar sus ganancias. De ahí el incremento de precios. Además, los costos de flete han aumentado de manera sustancial en los bienes y servicios que vienen de otros países.

“Para los productos que no tienen mucha competencia, resulta fácil subir los precios para recuperar las ganancias, porque en 2020 al parar la economía muchas empresas súbitamente se encontraron con que no tenían ganancias ni ingresos, y están buscando recuperarlos a través del incremento de precios, pero eso depende de que tanta competencia enfrentan”, comentó nuestro investigador.

Cotler recordó que los productos también suben dependiendo de lo que pase en cada mercado. Por ejemplo, lo que ocurre con el precio de los energéticos en México, que tras haberse reducido hasta en 10%, en mayo del 2020, para noviembre se empezaron a disparar alcanzando un incremento del 15%.

 “A las empresas les afecta esta subida de precios y se refleja en sus productos. No todos los productos suben por igual, depende lo que pase en cada mercado”, dijo. 

Para el especialista, la inflación del 7.36% con la que cerró México 2021, podría bajar a niveles del 4% a finales de este año.

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Valentina González/ICM