¿Recuerdan la escena de Billie Elliot en la que él no puede dejar de bailar y lo hace con tanta pasión que su padre acepta que se dedique al ballet? Ese deseo irrefrenable de crear lo ha vivido Valeria Montero desde que tiene memoria; tanto así que, los primeros recuerdos que tiene de sí misma son dibujando y pintando. 

Valeria, egresada de la licenciatura en Diseño Industrial de la Universidad Iberoamericana, se dedica actualmente al arte y su colorido trabajo además de conquistar Instagram, engalana los muros de varias tiendas de Adidas en México.

“Fue justo aquí en la IBERO, cuando era estudiante, que yo en mi tiempo libre me iba a la biblioteca, me ponía música y comenzaba a dibujar; luego empecé a subir mi trabajo a redes sociales y llegaron los pedidos”, nos comparte con nostalgia la artista.

Mientras acomoda sus coloridas obras en uno de los stands del Bazar, que cada noviembre celebra la universidad para apoyar y difundir los proyectos de las y los emprendedores y artistas de nuestra comunidad, Valeria nos dice con emoción “le debo mucho a la IBERO, estoy muy contenta de estar aquí de vuelta”.

El crecimiento de su carrera

“Aquí en la IBERO comencé a pulir mi estilo, el cual está en constante transformación, pero fue en la biblioteca donde todo inició”, menciona la también ilustradora, quien a partir de que comenzó a tener pedidos a través de Instagram abrió su propio sitio web, donde además de conocer su arte, puedes comprar sus obras y su libro para colorear. 

“Tengo siempre la mente abierta, me han pedido pintar, por ejemplo, pistas de baile para bodas y lo hago porque eso me da experiencia de trabajar en formatos grandes”, menciona Valeria, quien con su conocimiento de diversos materiales, pinta pinos de cerámica, maletas, murales o cualquier objeto que la inspire a crear. 

Ese talento para trabajar en cualquier formato la llevó a colaborar con Adidas, que buscaba un/a muralista para intervenir una de sus tiendas y donde finalmente embelleció los muros de las sucursales de Satélite y Polanco, en la Ciudad de México; de Tlaquepaque y Guadalajara en Jalisco y una en Tijuana, Baja California. Valeria también ha colaborado con marcas como Clever Company, Game Planet y Vogue.

Confía en ti, siempre

“Sé que tengo la oportunidad de hacer lo que me gusta y me alegra muchísimo el interés que la gente está teniendo en mi obra, para mí es difícil pensar en quién va a comprar mi arte. A mí me gusta crear con base en mis experiencias y es increíble ver que la gente conecte con eso y por lo tanto conmigo”, nos dice la artista. 

¿Se puede vivir del arte? “Es algo que hasta ahora he podido lograr, me encanta, pero a veces es difícil la incertidumbre de ok, este mes tengo ya un proyecto y después qué va a pasar, pero estoy aprendiendo a confiar más en mí y en mi arte siempre va a estar y voy a confiar en él”.

Nunca es tarde para abrazar nuestra verdadera vocación

Sus ojos verdes se iluminan cuando recuerda su infancia: “disfrutaba mucho dibujar, me encantaba mi clase de arte y desde chiquita supe a lo que me quería dedicar, pero cuando llegó el momento de elegir carrera la vida me llevó a Diseño Industrial”. 

A veces sí se pregunta por qué no escogió arte, pero entre las cosas que más le gustan de haber estudiado Diseño Industrial es que “me ayudó también a crear y a saber que todo tiene una solución, además tienes que soldar, tienes que cortar madera y aprendes sobre diferentes materiales”.

Y sobre ese camino hacia el descubrimiento de su verdadera vocación, la artista menciona que “la universidad sí da buenas herramientas, los maestros te dan teoría, pero también te dicen mucho de la vida afuera… cuando nos preguntaban ‘qué quieren hacer cuando acaben la carrera’, había gente que parecía tenerlo muy claro y yo al principio no tenía idea, pero descubrí que me gustaría encontrar una mezcla entre diseño industrial y arte”.

Cuando Valeria se dio cuenta de  que su pasión por el arte podía convertirse en su profesión, vió con mayor claridad las posibilidades que tenía y eligió materias optativas acordes; asimismo, recuerda con especial cariño su paso por los talleres de Difusión Cultural de la Ibero: “empecé con graffiti mural y de ahí tomé grabado y la verdad esa comunidad me cae muy bien, son muy amables, artistas finalmente”.

Así que ya lo sabes, el trabajo de tus sueños sí existe, pero como Valeria tienes que prepararte para construir tu camino todos los días.