Es importante que las universidades cuenten con espacios enfocados en la diversidad sexogenérica para que el alumnado tenga sitios donde se sienta seguro y en confianza al expresar libremente sus preferencias, así como para brindar apoyo a aquellas personas que se sientan vulnerables, consideran Diego Mauricio Álvarez y Verónica Amadeu Castillo, estudiantes de la Universidad Iberoamericana (IBERO) Ciudad de México, y quienes forman parte de Plural IBERO.

Diego Álvarez, Presidente de Plural y estudiante de Relaciones Internacionales, así como Verónica Amadeu, Vicepresidenta de Plural y estudiante de Psicología, nos hablaron de la relevancia que tiene el seguir construyendo una comunidad respetuosa y recíproca para que, paulatinamente, se vayan rompiendo ciertos estereotipos que consideran dañinos para la sociedad y que sólo generan violencia y odio.

“El objetivo es justamente dar visibilidad a todas las diversidades, en especial a la sexogenérica que es la que nos atraviesa directamente a la mayoría de las personas que forman parte de Plural”, indicó Diego. Verónica agregó que las personas que se integran por lo general no tienen espacios seguros fuera de la universidad, por lo que es importante ofrecérselos en el interior de su casa de estudios.

Para la estudiante de Psicología es un camino largo y lleno de retos, pero confía en que, a través de sus acciones, han logrado hacer grandes cosas, como la Semana de la Diversidad, donde dijo que buscan concientizar a las diversas áreas de la institución ofreciendo talleres, conferencias y pláticas referentes al tema.

 

 

 

 

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“En la IBERO tenemos una voz que es tomada en cuenta, partimos desde una visión activista dentro de las universidades, somos un espacio seguro, pero que también busca incidir dentro de nuestra propia escuela para ir poco a poco abriendo la mentalidad y concientizando a otras personas que no son parte de la comunidad o que en su caso lo son, pero nunca se han podido sentir identificados, identificadas o identificades con otras personas”, expresó Verónica.

Dicen sentirse felices por contribuir a crear una mejor comunidad en la IBERO, aunque —dicen— les gustaría contar con una mayor difusión para así llegar a más personas que tengan interés en conocer las acciones que se llevan a cabo en la institución.

Diego nos platicó que es importante aclarar que en ningún momento buscan que todas y todos piensen como ellos, pues debe existir el libre pensamiento sin afectar a las y los demás, pero que sí quieren generar esa empatía con su comunidad. Menciona también que uno de los retos es que el profesorado tenga las herramientas para nombrar y escuchar a su alumnado en términos identitarios.

Verónica asumió como tarea el lograr que el estudiantado sepa que existe un espacio como Plural IBERO, pues a pesar de todas las actividades que desarrollan —advierte—, todavía pasan desapercibidos para una buena cantidad de alumnas y alumnos.

 

 

 

 

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“Agradecemos mucho el espacio que se nos da y sobre todo el apoyo, pero dentro de la IBERO hay mucha gente que ni siquiera sabe de nuestra existencia. Por ejemplo, yo entré a la IBERO sin saber que existían estos espacios, por lo que considero que es importante visibilizar el activismo estudiantil y el movimiento que existe dentro de éste, no solo como nuestro activismo sino en general en la universidad”, subrayó la Vicepresidenta de Plural IBERO.

Referente a las posturas del Ideario y a preceptos que tienen que ver con la ética en el seno de la comunidad IBERO, Verónica y Diego agradecieron esta forma de pensar, pues aseguraron que esta visión humanista les ha ayudado a que más personas se sumen a su causa. “Honestamente creímos que iba a ser otro obstáculo, pues por lo general la religión y este tipo de temas no se llevan muy bien, afortunadamente nos equivocamos y en vez de un reto, ha sido un gran apoyo”, confesó Diego.

Por último, compartieron un mensaje a toda la comunidad que puede sentirse aislada y requiera apoyo para superar las problemáticas a las que se enfrenta:

“Una de las cosas que me motiva es poder incitar al cambio y brindar un lugar seguro como éste, ser como apoyo y dar esta esta comodidad y sentido de pertenencia a alguien que lo necesita, como en algún momento yo lo necesité”, expresó Verónica.

Por su parte, Diego hizo un llamado para que todas y todos generemos un poco más de empatía hacia las personas que se sienten vulnerables debido a cómo se identifican; dijo que brindar un poco de ayuda podría salvar la vida de muchas y muchos.

Texto: Alberto Elihú Cortés Hernández

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