La Sociedad de Alumnos de Ingeniería Química de la IBERO busca soluciones a los problemas ambientales que enfrenta México y para ello organizó el VIII Congreso Internacional de Sustentabilidad, un espacio de diálogo, aprendizaje y reflexión entre las instituciones privadas, públicas y académicas del país.

Para los jóvenes, este encuentro permite integrar la visión industrial, pública y académica, a través de la innovación, el conocimiento científico y las acciones interdisciplinarias, además de despertar y responsabilizar a los participantes en materia sustentable.

El presidente de la Sociedad de Alumnos de Ingeniería Química, Eduardo Garduño, platicó que este congreso, que se realiza desde hace ocho años, tenía un enfoque químico. Pero ante la urgencia de atender distintos temas, esta vez se decidió que se abordarían temas de finanzas, industria textil, energía, construcción y alimentación, con una mirada sustentable.

“Este año la idea del congreso fue hablar desde todos los temas de sustentabilidad porque es de todos, no solo de una industria. Se trata de un impulso de los jóvenes; cada vez hay más preocupación por el cuidado del medio ambiente. Creemos que es importante porque incluso el empezar ahora ya es tarde porque empiezas a detener la inercia, pero no a revertir el efecto”, dijo

En el primer día del VIII Congreso Internacional de Sustentabilidad se presentó una mesa sobre alimentación, salud y sustentabilidad, así como la conferencia sobre el bono solar, impartida por la egresada de Ingeniería Química de la IBERO, Gabrielle Carbonell; por su parte, Alejandro de la Brena, habló sobre Griyum: proteína a base de grillos; mientras que Adrián López y Marte Cázares hablaron sobre la primera piel orgánica hecha de nopal.

Durante la inauguración que encabezó la Mtra. Sylvia Schmelkes, vicerrectora académica de esta institución, destacó que la organización del evento ha estado a cargo de alumnos de seis distintas carreras: Ingeniería Química, Sustentabilidad Ambiental, Relaciones Internacionales, Derecho, Comunicación y Diseño Industrial.

Asimismo, reconoció que varias generaciones de estudiantes han estado involucradas en la organización de este evento que se ha convertido en un referente en nuestra casa de estudios. Y que los jóvenes han sido capaces de generar un evento recurrente, intergeneracional, con perspectiva multidisciplinaria que habla de una invención expresa de la IBERO de transitar a soluciones más complejas y hacia la necesidad de diálogo y de trabajo conjunto para abordar soluciones a diferentes problemas.

La Vicerrectora dijo que la IBERO quiere transitar a la multidisciplina, interdisciplina e incluso a la transdisciplina. Los organizadores de este evento, apuntó, nos muestran que esto es posible. Además, responde a una de las preferencias apostólicas de la Compañía de Jesús: colaborar en el cuidado de la Casa Común.

“También se ubica claramente en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, a la que como Universidad estamos obligados a contribuir. Desde ahí, visualiza la sustentabilidad vinculada a problemas de pobreza, desigualdad, carencias educativas, problemas de salud, violencia y son algunos de los problemas que se vinculan con la falta de sustentabilidad en el país”, dijo.

Por su parte, el estudiante Felipe Migoy, uno de los organizadoreas del congreso, habló de la urgencia de que México tenga una transición energética, resolver el tema sobre pesca y sus regulaciones porque se está acabando con la diversidad marítima, así como resolver la acidificación de los océanos.

Valentina González/ICM