Expresar tristeza es una forma sana de resolver nuestros problemas: académica
Sentirnos tristes no es un signo de debilidad, es una forma sana de enfrentar y aceptar nuestros problemas de manera responsable, ya que nos lleva a una reflexión profunda sobre cómo reaccionamos ante situaciones sobre las que no tenemos el control, considera la Dra. Ana Lilia Villafuerte Montiel, Coordinadora de la Maestría en Psicología Clínica de la Universidad Iberoamericana (IBERO) Ciudad de México.
La académica, quien cuenta con una Maestría en terapia familiar, indicó que la tristeza, al igual que las otras emociones que tenemos, tiene una función específica y ha evolucionado con la humanidad para acompañarla. Agregó que éstas surgen como respuesta a diferentes situaciones de nuestras vidas.
“Por ejemplo, el enojo es una emoción que nos carga de energía y nos sirve para quitar obstáculos que consideramos difíciles de superar; la alegría nos permite tener bienestar y un estado de ánimo muy positivo, justo para emprender nuevas cosas, mientras que la tristeza tiene como objetivo que nos quedemos en un estado de tranquilidad para poder calcular de manera más segura nuestro siguiente paso y no aumentar más carga a esa emoción”.
Ana Villafuerte, investigadora para el mejoramiento de la enseñanza y la praxis de la psicoterapia en México, aseguró que estar triste no significa que seamos débiles, sino que necesitamos experimentar esa emoción en ese momento. Ya sea por haber perdido a un ser querido o incluso un objeto de gran valor (personal o monetario); la tristeza nos ayuda a aceptar esta realidad, una en la cual debemos estar conscientes en que lo perdido ya no podremos tenerlo nuevamente.

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“Es importante convencernos de que las cosas malas nos pueden llegar a pasar, la tristeza en ese sentido colabora en que lo aceptemos, porque siempre tenemos la esperanza de que algo sea diferente y que de la nada todos nuestros problemas se van a resolver. Es importante ser optimista, pero hay situaciones en las que la realidad es otra”.
La académica de la IBERO explicó que cada persona experimenta la tristeza de diferente manera, por lo que algunas situaciones que parecen ser insignificantes para unas, para otras sí pueden resultarles dañinas. Recomendó que si en alguna ocasión nos sentimos tristes, nos desahoguemos de la manera en la que mejor nos parezca, siempre y cuando no dañemos a las demás personas ni a nosotros mismos.
“Leer, hacer ejercicio, pintar, escribir, escuchar música, son buenas maneras en las que podemos expresar nuestro sentir y de alguna manera desahogarnos. Por lo general cuando estamos tristes escuchamos canciones que hablan de tristeza, y no es que queramos aumentar esa emoción, si no que nos permite liberar un poco esa carga emocional”.
Por último, lamentó que a pesar de que se han hecho esfuerzos por darle importancia al cuidado de la salud mental, en la sociedad es mal visto que una persona se sienta triste, complicando que las personas puedan expresarse de manera sana, ya que por temor de ser tachados como débiles no se atreven a mostrar sus emociones.
Texto: Alberto Elihú Cortés Hernández
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