Huracanes, política y enfermedades no frenan al Servicio Social de Verano IBERO
Con la presencia del Dr. Alejandro Anaya, Vicerrector Académico, y la Dra. Laura Zamudio, Directora de Formación y Gestión de lo Académico, la Universidad Iberoamericana celebró la ceremonia de clausura del Servicio Social de Verano, con modalidad saliente, un evento que permite a la comunidad conocer y reconocer la importancia de la labor con la que el alumnado, como parte de su preparación académica y personal, colabora en actividades que buscan hacer un cambio positivo en la sociedad. Este año, además de los retos que conlleva el trabajar en causas fuera de la Ciudad de México, el estudiantado enfrentó situaciones como huracanes, olas de calor, expresiones políticas derivadas del proceso electoral y enfermedades.
“Tuvimos dos huracanes, no nos había tocado en otro verano […]. Nos tocó el huracán Alberto, que bajó de categoría, y luego el huracán Beryl. Hubo quienes se regresaron uno o dos días antes del periodo de finalización, pero hubo quienes estoicamente dijeron ‘yo me quedo’, y terminaron el periodo”, se sinceró el Mtro. Alfredo González Aguirre, Coordinador de Proyectos Sociales Universitarios, al arranque de la ceremonia que celebró el esfuerzo de 93 estudiantes de 24 programas académicos de licenciatura e ingeniería, que colaboraron en proyectos a nivel nacional e internacional en Baja California, Hidalgo, Estado de México, Puebla, Oaxaca, Yucatán, Quintana Roo, Toronto (Canadá), Nueva York (Estados Unidos) y Chicago (Estados Unidos).
“También nos tocaron, en los retos, enfermedades”, añadió González Aguirre, e indicó que otro tema del que su equipo estuvo vigilante fue el del clima político en las diferentes zonas del país, derivado del proceso electoral que ocurrió este año.
El Mtro. Alfredo González Aguirre solicitó reconocer a todas y a todos los profesores que apoyan al estudiantado en este proceso, así como al personal administrativo que funge como guía en cada paso: Melisa Esquivel, José Antonio Farías, María Fernanda Sánchez, Lucía Montiel, Leticia Reyes, Martha Balcazar, Saraí Bautista, Elisa Gutiérrez, Citlali Tuero, Laura Barreto, Leticia Laguna, Rafael Sandoval, María José Minakata, Dra. Laura Zamudio, Dr. Juan Eduardo García
y Dr. Alejandro Anaya, Vicerrector.
Tras la proyección de un video que integró parte del material audiovisual de las bitácoras de nuestras y nuestros alumnos, siete jóvenes tuvieron la oportunidad de contar lo que el servicio social les dejó: Yunuen, sorprendida por todo el trabajo que se hace en Oaxaca para acercar la educación y la cultura a zonas recónditas, y quien pudo expresar a jóvenes de este estado la importancia de la educación universitaria como alternativa a las filas del crimen organizado; ‘Juls’, que comentó que uno se involucra tanto con estas causas que llega a padecer “depresión pos-servicio social”, y Alondra, quien invitó a seguir reconociendo el trabajo de las personas que con su trabajo nos recuerdan que “sin la naturaleza, no somos nada”.
De igual manera, Aura, quien quedó cautivada con la construcción de comunidad en Guelatao de Juárez, Oaxaca, y el sentido de justicia que permite que violencias como el acoso hacia las mujeres sea prácticamente nulo. Emilio, ingeniero en telecomunicaciones que tuvo que aprender a dar clases a personas con discapacidad intelectual aunque esta actividad no está tan relacionada con su profesión. Daniela, quien trabajó con personas latinas diagnosticadas con VIH, lo que le permitió confirmar que los prejuicios continúan presentes pese a la información que abunda. Y María Fernanda, quien indicó la importancia de construir vínculos emocionales con quienes les reciben en campo para conocer de sus perspectivas y necesidades reales.
Estos testimonios inspiraron a más estudiantes a hablar de su experiencia: Mariana, quien vivió en Nueva York apoyando a migrantes y consiguió que la organización con la que trabajó abra una oficina en Ciudad de México. Carlos, de Derecho, que ocupó sus conocimientos legales para apoyar a pueblos originarios a defenderse en casos de despojo de territorio. Y Luisa y Diego, quienes contaron a Prensa IBERO su experiencia colaborando en el diagnóstico, con énfasis en sustentabilidad, sobre la producción de maguey y mezcal en pueblos de Oaxaca, y consideraron que la opción de Servicio Social en verano permite más involucramiento y dota la posibilidad de dedicar más tiempo a los proyectos, favoreciendo la adquisición de herramientas técnicas y emocionales.
El Vicerrector Académico Dr. Alejandro Anaya dijo, por su parte, que si bien el servicio social es un requisito legal en toda universidad, en la IBERO permite reforzar los valores humanistas con los que se forma a nuestro alumnado.
El Dr. Anaya invitó a las y los jóvenes reconocidos a preguntarse “¿Cuánto dejé y cuánto me llevé?” durante el proceso, y extendió las felicitaciones a las familias, que permitieron la movilidad y dieron siempre apoyo a la distancia.
Finalmente, el Mtro. Alfredo González Aguirre, anunció la convocatoria de la nueva edición de la Mejor Experiencia de Servicio Social, que año con año reconoce a los proyectos con mayor impacto social que realizan nuestras y nuestros alumnos.
El personal de la Coordinación de Proyectos Sociales Universitarios de la IBERO trabaja para garantizar que al cumplir con el Servicio Social colabores con instituciones cuya labor se enfoca en la solución de problemáticas sociales, y para que puedas consolidar tu formación profesional y humana.
Puedes comenzar con tu servicio social una vez que hayas cumplido el 70% de los créditos de tu carrera. Para más información sobre los trámites y fechas importantes, puedes contactar al área indicada a través de los siguientes medios:
Sitio web: https://serviciosocial.ibero.mx/
Correo electrónico: servicio.social@ibero.mx
Facebook: Servicio Social IBERO
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Instagram: serviciosocialibero
Texto y fotos: Jorge Luis Cortés
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