Se espera que para el año 2050, uno de cada tres hogares estará compuesto por una sola persona, y en la actualidad no hay políticas sociales que consideren este fenómeno a futuro. 

Así lo especificó Heriberto López Romo, director de Instituto de Investigaciones Sociales, egresado de la carrera de Comunicación de la Universidad Iberoamericana, durante la inauguración de la Muestra interactiva “Ni tan raros: modelo de familia para armar”, en la Universidad Iberoamericana. 

Dicha exposición está dividida en dos partes: por un lado, presenta piezas museográficas pertenecientes al acervo de la Biblioteca Francisco Xavier Clavijero, de la Ibero, al Museo Soumaya, a la colección de Rodrigo Rivero Lake y una obra que forma parte de la Fundación Jumex. 

Entre las piezas, se incluye un busto en marfil de la Sagrada Familia del siglo XVIII, propiedad de la colección Rivero Lake; un óleo sobre tela de 1806, que representa el árbol genealógico del capitán de granaderos, Manuel Solar, perteneciente al museo Soumaya; y una fotografía de Porfirio Díaz y su familia, propiedad de la Biblioteca Francisco Xavier Clavijero. 

En la segunda sección se encuentra un mapa conceptual conformado a partir de la investigación Ilustración de las familias en México, llevada a cabo por el Instituto de Investigaciones Sociales, el cual ofrece un panorama de los once tipos de familia considerados en la investigación. 

De acuerdo con López Romo, quien coordinó el equipo encargado de realizar la investigación, existen once tipos distintos de familia en nuestro país, en contraposición a los cinco tipos establecidos por el censo de 2010.

El investigador aseguró que menos de la mitad de las familias mexicanas encajan en el modelo tradicional de familia –un núcleo de padre, madre e hijos–, y prevalecen otras composiciones, algunas de las cuales serán más comunes en las próximas décadas.

Especificó que algunos de los modelos en crecimiento son las de las parejas jóvenes sin hijos, así como los padres de 60 años en adelante cuyos hijos han cambiado de hogar, a lo que llamó el “nido vacío”.

De igual manera, se mantiene el modelo de familia reconstituida –padres divorciados o separados, con hijos en uniones anteriores–, debido a las tasas crecientes de divorcio. Se calcula que en nuestro país ocurren 16 divorcios por cada cien matrimonios; según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 3.8 por ciento de los hogares se conforman por familias reconstituidas.  

En cuanto a los hogares del mismo sexo, el porcentaje se ubica en 0.6 por ciento.

Con respecto al hogar unipersonal, es decir, aquél en el que habita una sola persona, reveló que a dicha configuración pertenece uno de cada diez hogares en México, y, de acuerdo con un pronóstico conservador, el número de personas que viven solas aumentará considerablemente en las próximas tres décadas.

Asimismo, destacó el papel de la familia uniparental; en particular, la encabezada por una madre sin padre, considerada como el segundo tipo de familia en el país, al constituir 16 por ciento de los hogares encuestados.

Un modelo que decrece, aseguró López Romo, es el de la familia extensa –una estructura de parentesco de varias generaciones que cohabitan en un mismo hogar–, la cual, en la década de los 80, correspondía a 20 por ciento de las familias, y que hoy se ubica en un 12 por ciento.

La exposición es un esfuerzo conjunto de la Universidad Iberoamericana y el Instituto de Investigaciones Sociales. La curaduría corrió a cargo de Carlos Villanueva y Marlene Chaput. 

LLCh/ ah