Los programas de intercambio que ofrece la IBERO, representan una oportunidad de enriquecer la formación profesional del estudiante, además de proporcionar una valiosa experiencia. Éstos tienen como principal objetivo que los cursos que inscriba el alumno en la universidad de destino, complementen su plan de estudios de licenciatura o posgrado, fortaleciendo su formación profesional a partir del estudio de asignaturas no necesariamente idénticas, pero sí idealmente compatibles, cuyos contenidos originales permitan un mayor conocimiento de la disciplina de estudios a la que pertenezca el alumno.

Los Convenios de Intercambio de Estudiantes posibilitan a las instituciones signatarias el mutuo reconocimiento de los estudios que realicen sus alumnos. A través de estos convenios, los estudiantes pagan sus colegiaturas en la universidad de origen y se les exime de estos pagos en la universidad de destino.

Por la naturaleza de los trámites y el considerable número de participantes en estos programas, es pertinente que el alumno presente su documentación completa y con suficiente anticipación.

Es indispensable poseer el dominio del idioma de la universidad elegida y tener un excelente comportamiento académico, así como cumplir con los requisitos específicos establecidos por la IBERO y por la universidad de destino.

El alumno aceptado por la universidad de destino deberá permanecer un periodo lectivo completo (primavera u otoño) y este plazo podría extenderse a dos con los requisitos correspondientes.

En algunas universidades de destino no se permite la prórroga.

Uno de los aspectos más importantes de estos programas de intercambio es el reconocimiento de las calificaciones obtenidas en la universidad en la que llevó a cabo su intercambio, por lo que el estudiante que desee participar, deberá informarse de las asignaturas que la universidad de destino ofrece y que puedan ser parte de su plan de estudios. Esta elección preliminar deberá someterla debidamente documentada, a consideración y autorización del Coordinador y/o persona responsable del programa.

El proceso de selección de candidatos consta básicamente de dos etapas: la primera es la postulación por parte de la Subdirección de Movilidad Estudiantil, la cual toma en cuenta el número de créditos del alumno y su promedio. Y la segunda, es la aceptación en la universidad de destino. Esta toma en cuenta la(s) cartas(s) de recomendación.

Debido a la diversidad de calendarios escolares, es preciso que el candidato verifique y se entere amplia, suficiente y oportunamente de las fechas de inicio y termino de cursos en la universidad de destino.

Los costos de tramitación del intercambio, transportación, hospedaje, manutención y demás gastos personales relacionados con la participación en este programa quedan a cargo del estudiante, así como: cuotas de utilización de material de talleres y laboratorios, uso de instalaciones deportivas, actividades extracurriculares, etc., en la universidad de destino.

Es importante que el alumno tome en cuenta el costo de vida de la ciudad donde se establecerá durante su intercambio, para presupuestar debidamente su estadía y con ello evitar inconvenientes o imprevistos económicos que alteren la buena marcha de sus estudios.

Junto con la Carta de Aceptación el alumno podrá recibir los formatos necesarios para elegir las alternativas de hospedaje que la universidad anfitriona ofrece.

Para la tramitación de la visa de estudiante el alumno debe contar con la Carta de Aceptación de la universidad de destino, y presentarse en la Embajada o Consulado del país correspondiente.

El alumno debe tener presente que a su regreso entregará la constancia de calificaciones oficial emitida por la universidad en la que realizó sus estudios.