Hace 25 años, en Beijing, China, en el marco de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, el mundo hizo una promesa: hacer realidad la igualdad de derechos y oportunidades para las mujeres en todo el planeta. Para la División de Investigación y Posgrado no hay mejor manera de sumarse a estas celebraciones que con la realización del Seminario Permanente El Enfoque de Género en la Investigación.

Al respecto, conversamos con Capitolina Díaz Martínez, quien impartirá este curso de modalidad híbrida, dirigido a toda la comunidad IBERO con actividades de investigación y que tendrá su primera sesión el lunes 5 de octubre.

Catedrática de Sociología en la Universidad de Valencia, Capitolina Díaz Martínez es enfática cuando dice que este curso está pensado más bien para personas que no investigan temas de mujeres -para cualquier persona que haga una investigación que tenga impacto con seres humanos-. Las personas que investigan o se enfocan en temas de mujeres, dijo, en buena medida ya conocen gran parte de lo que se verá en el curso.

Para ella, es desde los protocolos de investigación donde se tiene que asegurar la inclusión de la perspectiva de género, sea que se trate de una investigación biológica, de ingeniería informática o en antropología. Pero también desde el título mismo que se le da a la investigación, incluso las agencias de cooperación que se buscan para apoyar ese trabajo, la composición del equipo de investigación y hasta el tipo de difusión que se hace de la investigación.

El área principal de trabajo de Capitolina Díaz Martínez es la sociología del género, con énfasis en el vínculo entre género y ciencia. Lo que ella ha impulsado desde su especialidad es cómo incorporar la perspectiva de género en la investigación científica y cómo incorporarla también a la docencia universitaria. Lo importante, comentó, es mostrar “ese otro compromiso que tenemos al realizar investigación con perspectiva de género”.

Durante la conversación sostenida de manera virtual, Capitolina Díaz expuso que hay dos razones por las cuales es casi obligado incorporar la perspectiva de género, aunque aclaró que haría más referencia a la primera: una es de tipo epistemológico y otra tiene un carácter político.

Los seres humanos, explicó, somos extraordinariamente complejos y variados, por ello necesitamos tener un abordaje científico que no deje fuera a ninguna parte de esos seres humanos, en cualquier ámbito; por ejemplo, la medicina o la antropología se han olvidado de las mujeres, no las han visto, no las han reconocido, es una cosa que Capitolina ha llamado “agnosia de género”. Porque, además, hay otros géneros que también están presentes en el mundo no solamente las mujeres. De hecho, dijo, tendríamos que estar hablando de “perspectiva de géneros”, en plural.

Tan sólo la variedad de hombres es muy grande, lo mismo que la variedad de mujeres; los hombres no son iguales entre sí, las mujeres como grupo no son iguales entre sí y con frecuencia hay mayor divergencia de unos hombres con otros hombres que algunos hombres con algunas mujeres, abundó la doctora en Sociología de la Educación.

Al ejemplificar lo anterior con lo que sucede en un laboratorio, Capitolina Díaz explicó: "Si estudiamos roedores no podemos estudiar sólo 'ratoncitos', hay que tener en cuenta ratoncitos y ratoncitas; tener en cuenta el género-sexo de la persona investigadora. Incluso, se ha demostrado que cuando hombres manipulan roedores aumenta el estrés de los roedores, eso pasa si cualquier persona lo hace, pero más cuando lo hacen algunos hombres.

“Si el que un varón investigue a un animalito, como un ratón, hace que varíe la respuesta del ratón, ¿qué no sucederá cuando un investigador o investigadora investiga a otros seres humanos, cuando se acerca a esos seres humanos con toda la carga de las normas de género o los estereotipos de género? La mirada es una mirada muy sesgada porque somos seres definidos generizados (definidos por nuestro género), se trata de una percepción de género y de una autopercepción de género”.

A unos días de iniciar este Seminario para personal investigador, Capitolina Díaz nos comenta que al contenido sobre la inclusión de la perspectiva de género en la investigación le ha añadido una 'i' de innovación (perspectiva de género e innovación) porque “así como no podemos hablar de investigación sin incluir la perspectiva de género desde un punto de vista interseccional tampoco podemos entender ya la investigación sin la innovación, ya que mucha parte de la investigación tiene un carácter aplicado o potencialmente aplicado, y entiendo que universidades como la IBERO, que es una universidad con un fuerte compromiso social, tiene también una dosis importante de innovación, por sus políticas de apoyo, de mejora social, que fomentan la cohesión social y la igualdad social no sólo la de género”.

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Jesús González Alcántara/ICM