Para aprender Ingeniería en Biotecnología las y los estudiantes deben apasionarse por la biología, la química, la física y las matemáticas por ser una ingeniería aplicada a procesos biológicos, afirmó el Dr. Alejandro Torres Haro, Director de la carrera en la Universidad Iberoamericana (IBERO) Ciudad de México.

Hace unos días, nuestra casa de estudios inició una nueva etapa en su historia con la presentación oficial de la Ingeniería en Biotecnología, un programa innovador que busca formar profesionales capaces de transformar procesos biológicos en soluciones sostenibles para el bienestar social y ambiental.

Refirió que el perfil del estudiante que se busca en la IBERO es que no solo pueda incidir en la investigación, sino en desarrollos e innovaciones industriales que puedan contribuir tanto a nivel social como ambiental.

“No buscamos que el conocimiento se quede en la academia o el laboratorio, sino que sea tangible a nivel social. Hay empresas que ya trabajan en la remoción de contaminantes de la atmósfera, se dedican al cultivo de microalgas a nivel masivo para consumir el dióxido de carbono y liberar el oxígeno”, explicó.

Ejemplificó que la Ingeniería en Biotecnología en la actualidad estudia la bacteria Ideonella sakaiensis, que puede romper las moléculas y digerir plástico, el cual está ampliamente distribuido en nuestros ecosistemas terrestres, lo cual tiene un potencial para mejorar el medio ambiente.

El futuro apunta a la Ingeniería en Biotecnología

“Él o la estudiante de Ingeniería en Biotecnología puede decidir el enfoque práctico al que quiera llegar, ya sea en la salud, el medio ambiente, la alimentación, las fermentaciones, las modificaciones y las terapias genéticas. El futuro apunta a la Ingeniería en Biotecnología”, señaló.

Describió que en 2022 un equipo de investigadores de la Universidad de Maryland en Estados Unidos desarrollaron modificaciones genéticas en porcinos y con esa investigación se realizó el primer trasplante de corazón de un cerdo a un ser humano para dar solución a enfermedades degenerativas.

“Hay industrias que ya trabajan en la producción de colorantes naturales que tienen efectos antioxidantes. Por ejemplo, producción de carotenoides, lo que incide directamente en la farmacéutica, la cosmética y en los alimentos porque los antioxidantes se podrían usar en estas áreas del conocimiento” acotó.

Finalmente, dijo que si hay jóvenes interesadas o interesados en Ingeniería en Biotecnología podrán generar soluciones sostenibles, realizar investigación, desarrollo e innovación integrando inteligencia artificial, que es un auge que también se tiene en la actualidad, derivado del potencial en beneficio de la sociedad y del medio ambiente.

Texto: Luis Reyes/Fotos: Francisco Calleja y Luis Reyes

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