Propone académica IBERO ciencia e investigación con proyección a futuro para México

Jue, 11 Jul 2024
Mayor inversión y apoyo a la formación de jóvenes científicos, pide la Dra. Cristina Oropeza, del Depto. de Física y Matemáticas
Llama a “poner a la ciencia y a la tecnología en el lugar que les corresponde”
  • La Dra. Cristina Oropeza Barrera, del Departamento de Física y Matemáticas de la IBERO

Dar mayor inversión a la ciencia básica, apoyar en la formación de jóvenes científicos, asignar becas por igual a universidades públicas y privadas, y fortalecer la infraestructura para hacer investigación con proyección a futuro, son propuestas que la Doctora (Dra.) Cristina Oropeza Barrera, académica del Departamento de Física y Matemáticas de la Universidad Iberoamericana (IBERO), pone sobre la mesa para que sean consideradas por la nueva Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, que sustituirá al Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt). 

La especialista de nuestra casa de estudiosque, por cierto, hace investigación sobre las propiedades del bosón de Higgs—, platicó con Prensa IBERO en torno al reciente anuncio de la presidenta electa Claudia Sheinbaum de que no habrá gasto adicional para esta nueva Secretaría, que dirigirá la académica y científica Rosaura Ruiz Gutiérrez para promover ciencia, tecnología e innovación. 

La Dra. Oropeza Barrera forma parte de 169 personas investigadoras de nueve instituciones en México que trabajan en el laboratorio del Centro Europeo de Investigaciones Nucleares (CERN). Ella es responsable del experimento CMS (Compact Muon Solenoid) en el llamado Gran Colisionador de Hadrones, que permite estudiar los pilares fundamentales de la materia. A su consideración, el fortalecimiento a la ciencia tiene que reflejarse en un plan integral de inversión a largo plazo. 

 

La ciencia debe ser con proyección a futuro, para que permita mantener y detonar el crecimiento del desarrollo científico en las siguientes décadas. Se han perdido apoyos y becas, se ha categorizado a la investigación, la cual tiene que avanzar de la mano de todas las personas. Me gustaría ver mayor inversión en este sector, poner a la ciencia y a la tecnología en el lugar que le corresponde”, acota. 

Destaca que la ciencia puede incidir sobre políticas públicas y sociales, pero no se debe dejar de lado la inversión en las ciencias básicas, porque la historia ha enseñado a varios países que de ella derivan grandes beneficios, muchos inesperados, y por ello aboga por más apoyo y compromiso en el sector, en medio de la creciente incertidumbre que existe para quienes hacen investigación. 

Indica que las instituciones públicas reciben estímulos económicos del Sistema Nacional de Investigadores, pero las instituciones de educación superior privadas reciben otra distinción cuando solicitan recursos federales, por lo que han recurrido a amparos para defender el derecho de acceso a becas de posgrado para no afectar el avance científico del país. 

Detalla que varias instituciones académicas de México trabajan con el CERN y los gastos de los experimentos que se hacen con este laboratorio como el AMS, Alice, CMS y NA62, los ha cubierto Conahcyt, pero cuando vino el cambio al Fideicomiso de Ciencia, los apoyos económicos no se consideraron para que pudieran acceder a los datos de estos experimentos. 

"No nos queremos quedar atrás como país, el mundo avanza a pasos agigantados. Si queremos ser potencia y ser competitivos, tenemos que invertir en ciencia y tecnología, estar al nivel que están otros, y eso implica infraestructura, tecnología, personas altamente capacitadas, justo ése es el plan integral con visión a largo plazo que creo que hace falta”, sostiene. 

Afirma que la ciencia ofrece información valiosa de las investigaciones en varias áreas, lo que ayuda a orientar decisiones basadas en evidencia, para la transferencia de conocimiento. 

“Y en este hacer cada quien lo que le corresponde, a las universidades les toca apostar por la ciencia, mantener la infraestructura a la vanguardia, generar las condiciones para que la gente haga investigación. La universidad es un espacio donde podemos fomentar vocaciones y los jóvenes necesitan la ciencia para experimentar”, puntualiza.  

Texto: Luis Reyes. Foto: Conahcyt  

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