El modelo de las Clínicas Jurídicas que existe en la Universidad Iberoamericana, las cuales tienen la tarea de involucrar al alumnado con casos reales de personas que necesitan apoyo en temas legales, brilla gracias a su impulso a la interdisciplinariedad, lo que le otorga una ventaja sobre los proyectos de este tipo de espacios que existen en Estados Unidos, opinó el Dr. David C. Baluarte, Director de la Clínica para los Derechos del Inmigrante en el Washington and Lee University School of Law (W&L Law), y quien este semestre se encuentra en la IBERO como profesor visitante.

El académico, quien colabora en nuestra Clínica para Refugiados Alaíde Foppa, adscrita al Departamento de Derecho, afirmó en entrevista con Prensa IBERO que uno de sus objetivos en la IBERO es fortalecer la relación de las clínicas jurídicas de nuestra institución con las que hay en su país natal, principalmente en casos de defensa de personas refugiadas, por lo que aprenderá sobre las diferencias que existen en procesos de enseñanza y legislación.

“Estoy estudiando el fenómeno de la externalización de la protección de refugiados, una obligación que tienen los Estados Unidos (EU) pero que ha pasado a México, y que ha resultado en un tremendo incremento en los casos de solicitantes de asilo aquí, en ese contexto quiero que las clínicas de mi país colaboren más con las clínicas en México”, señaló el especialista.

Respecto de la importancia que tienen las clínicas jurídicas en las escuelas, el especialista en protección de personas refugiadas opinó que es muy importante su implementación, ya que, por lo general, la mayoría de las Academias se enfocan en la preparación de la docencia, sin embargo, reiteró la relevancia que tiene que la comunidad estudiantil se adentre en casos reales para poder irse preparando en la vida profesional.

Comentó que una de sus mayores preocupaciones es que durante sus años de docencia ha sido testigo de cómo muchos egresados y egresadas de la carrera de Derecho no encuentran trabajo o enfrentan dificultades para integrarse a nuevos equipos debido a su falta de experiencia en el campo. Agregó que las empresas no quieren pasar los primeros años entrenando a profesionistas que recién egresaron: quieren que las y los profesionistas lleguen ya preparados para cualquier situación.

“Debemos formar abogados jóvenes con la capacidad de llegar a la profesión de manera efectiva, poder hablar con un cliente de una manera sensible, armar un caso con pocos recursos, preparar escritos, aprender las formas en que las instituciones funcionan, etcétera. Son cosas básicas que realmente incluso al egresar de las escuelas no saben hacer la mayoría de alumnos”, aseguró.

Destacó que una de las cosas que le ha resultado fascinante es que en la IBERO las clínicas están abiertas para todas las carreras, cosa que en Estados Unidos no pasa.

“En ese sentido diría que las clínicas acá en la IBERO llevan una ventaja, ya que en EE. UU. apenas nos estamos dando cuenta de la importancia que tiene la interdisciplinariedad en la representación de los clientes”, afirmó.

Conferencia Magistral

Por último, David Baluarte hizo una invitación a la comunidad IBERO para asistir al Encuentro Nacional de Clínicas Jurídicas, que se llevará a cabo el 12 y 13 de octubre, donde dará una Conferencia Magistral para hablar sobre la urgencia de fortalecer la relación entre las clínicas de México y EE. UU. y tratará temas en común para apoyar la defensa de refugiados y refugiadas.

“Voy a dar información vital sobre el movimiento de la educación clínica tanto en mi país como aquí en México, y ver los puntos en común en que se pueden reforzar los trabajos en colaboración binacional”, concluyó.

Texto y Foto: Alberto Elihú Cortés Hernández

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