En México, se estima que 15 de cada 100 habitantes sufren depresión y la cifra podría ser aún mayor, ya que algunas personas no han sido diagnosticadas y viven hasta 15 años sin saber que la tienen. Además, seis millones de personas entre la niñez y la adolescencia también manifiestan este trastorno mental.

Paola Colunga Serralde y Alina Laguna de la Rosa, de la Clínica del Bienestar Universitario (CBU), bridaron capacitación en Primeros Auxilios Psicológicos a personal de la Universidad Iberoamericana (IBERO) Ciudad de México (CDMX) para que proporcionen apoyo, reduzcan peligros y brinden herramientas a personas con crisis.

¿Qué es una crisis?

La crisis es un estado temporal que se caracteriza por una desorganización reflejada en la incapacidad para enfrentar alguna situación adversa, dificultad para manejar adecuadamente las emociones o hay complicaciones para enfocar el pensamiento y la conducta para resolver algún problema. Entre las causas de una crisis están:

• Pérdida de un ser querido
• Problemas económicos o laborales
• Rupturas sentimentales
• Experiencias traumáticas
• Estrés extremo
• Estrés escolar

Hay que estar muy atento a personas que presentan síntomas emocionales de desesperanza, irritabilidad, desamparo, tristeza, confusión, ansiedad y frustración. También pueden ser síntomas físicos: llanto, pérdida de control, sudoración excesiva, palpitación, temblor, aceleración del ritmo cardiaco, dificultad para respirar, tensión muscular, mareos o debilidad.

¿Qué indicadores te hacen saber si alguien está en una crisis?

• Cambios en la alimentación
• Dormir demasiado o tener problemas para dormir
• Usar alcohol, tabaco u otras sustancias en exceso
• Sentirse abrumado y sin ganas de enfrentar el día a día
• Pasar de un estado de ánimo a otro de forma muy brusca
• Sentir enojo con demasiada intensidad o con frecuencia
• Actuar de manera agresiva o violenta con los demás
• Sentirse desconectado o distante con los demás
• Preocuparse demasiado o sentir ansiedad la mayor parte del tiempo
• Estar triste con frecuencia, sin una razón clara
• Sentir mucha desmotivación
• Perder el interés en cosas que antes se disfrutaban
• Tener pensamientos sobre hacerse daño, lastimar a alguien o dejar de vivir

¿Qué hacer si identificas indicadores de alarma?

• Mantener la calma para acercarte a una persona en crisis
• Ver a tu alrededor algo que le esté afectando
• Consultarlo con alguien más y tener una segunda opinión
• Acercarte a la persona y hablar con ella
• Recomendar ir al servicio médico o a la Clínica del Bienestar Universitario

Antes que hacer cualquier cosa, pregúntate ¿qué emociones te provocan la situación?, ¿te sientes en condiciones para ayudar? Si tu respuesta es no, busca a alguien que pueda apoyar. Si tu respuesta es sí, da acompañamiento a la persona haciendo presencia, ten el compromiso de escucharla y luego canalizarla en los lugares antes mencionados.

Toma en cuenta que hay que cuidar el lenguaje corporal si ofrecemos ayuda, fijarse que no haya objetos con los que la persona pueda hacerse daño y evitar el contacto físico. Hacerle ver que lamentas lo que está pasando y referirla con algún especialista.

Recuerda que el ingreso a la universidad puede representar cambios en las amistades o cambios de residencia o de escuela, lo que lleva un proceso de adaptación. Algunos datos que pueden ser útiles:

• Más de 15% de jóvenes mexicanos presentará el primer episodio de algún trastorno mental entre los 19 y los 24 años
• Las carreras asociadas a la salud representan mayor desgaste emocional en los jóvenes
• Las mujeres tienen más intentos suicidas en comparación con los hombres, quienes frecuentemente mueren en el primer intento

Texto y fotos: Luis Reyes

Notas relacionadas:

• ¿Qué es la depresión y cómo saber si la padezco?
• ¿Cuál es la diferencia entre depresión y ansiedad? Académica IBERO nos explica
• Estar triste y tener depresión no son lo mismo, psicóloga Ibero nos explica
• Académico habla sobre los detonantes de la depresión entre universitarios