Sistema para empaquetar desechos, un aporte IBERO al cuidado del agua

Mar, 23 Mayo 2023
Una vez obtenida la patente, el invento se somete a las consideraciones del mercado; su creador, el Mtro. Alejandro von Ziegler, confía en su viabilidad
Se utiliza para recolectar desechos sólidos de los sanitarios en aviones, baños portátiles o incluso hogares, sin que esto represente uso de líquidos
  • El costo de esta tecnología es muy bajo, menos de $500 por producto.

Una vez que el Sistema de Empaquetado de Película Plástica Tubular obtuvo su patente –en manos ya de la Universidad Iberoamericana— el profesor en Ingeniería Mecánica y Eléctrica, Alejandro von Ziegler Guardado, quien lo concibió y desarrollo de la mano del también académico e investigador IBERO Francisco Martín del Campo y Gómez, confía en que el mercado abra las puertas para su comercialización y, con ello, pueda llegar a buen término la travesía de este producto de incidencia inspirado en el interés de ahorrar agua y, con ello, cuidar el medio ambiente, conforme los valores de nuestra institución. 

Pero, ¿qué tiene que ver este proyecto con los afanes de protección de recursos naturales, por muchos presumidos, pero por muy pocos llevado a la acción

El Mtro. von Ziegler Guardado, quien se ha especializado en el diseño óptimo de geometrías --que explica desde un contexto de cargas y resistencias qué hay detrás de todo aquello que vemos en el mundo físico: imágenes, cálculos, conceptos— detalla que su invento es una aplicación para el manejo de desechos sanitarios domésticos, un “Toilet sin Agua”, como se denominó en un primer momento a la iniciativa. 

El Mtro. von Ziegler Guardado se ha especializado en el diseño óptimo de geometrías. 

 

El objetivo del diseño fue “generar un mecanismo de bajo costo, orientado a tener impacto a partir de su sentido práctico y accesibilidad, y no al mayor beneficio económico”, un modelo funcional y al alcance de la enorme mayoría de las personas. En la mira estaba, pues, el desarrollo de un producto que permita captar los desechos de los sanitarios sin gastar agua, y contribuir así en la solución de problemas generados por la escasez de líquido

El dispositivo mide 40 centímetros por lado y tiene una altura de 60 centímetros.

 

El sistema es un mecanismo que utiliza una película plástica tubular, digamos que una bolsa continua para los WC, y puede ser útil tanto en el terreno doméstico como en los sanitarios que se usan en el transporte (aviones o camiones) o los portátiles que se instalan por tiempos reducidos para conciertos o reuniones masivas en sitios públicos.  

Si nos imaginamos el proceso en el terreno de la práctica: un usuario entra al baño en una casa, un avión o un sanitario portátil en una feria. Al hacer sus necesidades fisiológicas activa el mecanismo por pedal, sin consumo de energía. Éste prensa la bolsa y en el momento en que el usuario lo acciona, encapsula la materia y de inmediato se vuelve a cerrar herméticamente, de manera que no se filtran olores. El proceso, al ser continuo y cíclico, impide que se requiera de agua. Los residuos se empaquetan en bolsas con sólidos, mientras que los desechos líquidos irán directamente al drenaje. Las bolsas se depositan en recipientes que después se desechan. En comunidades rurales está la posibilidad de hacer composta y convertir la materia en abono orgánico. En ciudades puede disponerse a través de los servicios de limpia. 

El académico-investigador de la IBERO explica que el costo de esta tecnología es muy bajo, hablamos de pocos cientos de pesos, menos de 500 por producto, sin hablar del inodoro, que es básicamente el mismo que funciona en cualquier espacio, solo que se le adapta una apertura lateral que permite retirar los desechos. El dispositivo tiene capacidad para 100 bolsas, lo que permite cubrir 100 ciclos. 

El impacto que puede tener este producto es considerable, si lo pensamos, por ejemplo, en aviones, que llegan a cargar hasta una tonelada de agua para los sanitarios. Si un avión pesa 200 toneladas, estamos hablando que el agua que lleva representa el 0.5% del total, y viendo esto desde la perspectiva del consumo de combustible que esto exige si se está volando todo el año, hablamos de volúmenes enormes de dióxido de carbono (Co2) que pueden dejar de emitirse en defensa de la atmósfera.  

 

Alejandro von Ziegler reflexiona, sin afán de querer parecer catastrofista, en el sentido de que, si nos situamos frente a lo que han denominado el ‘apagón’ de agua, en algunas ciudades asoman escenarios de familias que pueden llegar a pasar una o dos semanas sin agua para el inodoro. “Entonces, si tengo un dispositivo en mi casa y lo puedo usar a voluntad, entonces dispongo de una solución, sin que el costo de este recurso signifique un impedimento”, explica. 

¿Pensaríamos entonces en sanitarios híbridos que puedan funcionar, de acuerdo con la disponibilidad que haya del líquido, es decir, que se utilicen con o sin agua? 

Sí, y por eso soy optimista con el producto a pesar de estadísticas de innovación que nos dicen que todo artículo nuevo conlleva riesgos altos. En términos generales las empresas de éxito logran colocar un producto de cada 100 en el mercado. Por ejemplo, 3M, estando tan consolidada en el campo de la innovación, genera muchas ideas, pero de cada centenar sólo una llega a tener impacto y a desarrollarse. Estimaría yo que en un año podríamos tener claridad sobre el futuro de nuestro proyecto. 

 

La patente en México se otorgó el 2 de agosto de 2021; en Colombia el 3 de diciembre de ese año y en Brasil está en trámite, pues se solicitó en mayo de 2022 y la ley exige que dure por lo menos un año la revisión para asegurarse de que en ninguna otra parte en el mundo se tenga registro de un producto similar.    

 

Y es que, una vez que se ha obtenido la patente, el producto se puede comercializar. El Mtro. von Ziegler comenta que han tenido pláticas con empresas. La IBERO ha establecido la vinculación con firmas interesadas, aunque en este momento no se puede dar más información por la naturaleza de este tipo de procesos. Se han desarrollado estudios de mercado y lo que sigue es la elaboración de prototipos a medida para las empresas interesadas. 

El producto beneficiaría a muchas personas --argumenta el académico-investigador--, y aquí la cuestión del cuidado ambiental resulta crucial. Quizá en este momento no lo vemos como humanidad porque apenas se está asomando la punta del iceberg. El escenario con la escasez de agua se antoja complicado, y no es que sea fatalista, es solo la realidad (el académico recomienda ver las noticias recientes sobre sequías en distintas partes del mundo y previsiones para los próximos años). 

El docente de Ingeniería Mecánica y Eléctrica en la IBERO llama a tener presente la conexión que existe entre consumo de agua y emisión de Co2: “la gente se pregunta cómo se conecta esto: pues bien, llevar el agua de un lado a otro implica el uso de bombas eléctricas o, en el peor de los casos, de combustión, pero como quiera que sea el transporte del líquido consume energía. Cada litro de agua que yo ocupo en mi casa al abrir la llave representa la emisión de Co2 y cada litro que ahorro, pues le economizo ese Co2 a la atmósfera. Por eso es que, a largo plazo, un proyecto de estos en cuanto a su incidencia ambiental tiene un efecto considerable. Viéndolo desde esta perspectiva el producto es sumamente importante”. 

 

La carrrera de Ingeniería Mecánica y Eléctrica es una de nueve que ofrece el Departamento de Estudios en Ingeniería para la Innovación. Las otras son Ingeniería Biomédica, Ingeniería en Mecatrónica y Producción, Ingeniería de Tecnologías de Cómputo y Telecomunicaciones y los Posgrados: Maestría en Gobierno de Tecnología de Información, Maestría en Ciencias de la Ingeniería (interdepartamental), Maestría en Gestión de la Innovación Tecnológica (interdepartamental), Doctorado en Ciencias de la Ingeniería (interdepartamental) y la Especialidad en Seguridad de la Información.
 

 

Es entonces doble el beneficio, no se gasta agua ni se desencadena el proceso de generación de energía que es obligado para que se pongan en marcha los sistemas que llevan el agua hasta los hogares. 

Es un invento que su creador, el Mtro. Alejandro von Ziegler, confía que en breve se convierta en producto y esté en el mercado para beneficio de nuestra casa común

Texto: Jorge Cervantes Magaña. Fotos: Alberto Elihu Cortés Hernández.

Notas relacionadas 

La creación del Sistema de Empaquetado de Película Plástica Tubular es una iniciativa que concitó el apoyo del Departamento de Estudios en Ingeniería para la Innovación, de la Vicerrectoría Académica de la IBERO, de la Dirección de Investigación y Posgrado (DINVP), de la Oficina Jurídica, y de Fomento de Investigación y Cultura Superior (FICSAC, patronato económico y de desarrollo).  

 

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