El uso eficiente, ahorro y reutilización del líquido, la calidad de agua de consumo y el control de la contaminación en agua son temas centrales en la gestión ambiental de la Ibero.   

Los esfuerzos se concentran en reducir el uso de agua potable en los procesos operativos regulares, mantener la calidad potable en el líquido que se consume y cumplir los parámetros normados de contaminación en el agua resultante de sus procesos. 

Esto ha llevado a implementar proyectos como el de la operación de un sistema alternativo para la captación, almacenamiento y aprovechamiento de agua de lluvia ubicado en los niveles -3 y -4 del estacionamiento E-7. Cuenta con una superficie de captación de 4,750 m2 y capacidad de almacenamiento de 270 m3. En temporada de lluvias se aprovechan casi 750 m3 para alimentar los muebles sanitarios (inodoros y mingitorios) de baños de los edificios A, B, C, D, I, J, Q y R.  

Otro sistema alternativo opera en el área de talleres de mantenimiento. Ahí se capta el agua pluvial de la cancha de futbol soccer, se recolecta y almacena en un tanque de 5,000 litros y desde ahí es bombeada para alimentar los muebles sanitarios de los baños de vestidores de mantenimiento y servicios. En la temporada de lluvias se estima que se aprovechan 35 m3 de este sistema.  

Asimismo, la universidad cuenta con dos sistemas de almacenamiento de agua, uno de agua potable con una capacidad total de 2,200 m³ y dos de agua residual tratada, con capacidades de 170 m3 y 200 m3, respectivamente. Las cisternas reciben mantenimiento periódico (dos veces al año) para evitar fugas y contaminación. 
 

Los esfuerzos de la universidad por reutilizar el agua en procesos donde esto sea posible pasan también por el tratamiento de sus aguas residuales in situ y la compra de agua residual tratada producida por la empresa concesionada por el Sistema de Aguas de la Ciudad de México en la zona de Santa Fe.   

Desde el inicio de las operaciones del campus, la Ibero opera una planta de tratamiento de aguas residuales (PTAR) consistente en un sistema aeróbico convencional al que ingresa la descarga total de las aguas residuales crudas del campus (una mezcla de aguas provenientes de los servicios sanitarios, cocinas, limpieza y regaderas), excluyendo las aguas pluviales y, cuyo efluente se reutiliza en el riego de los jardines.  

Por otra parte, a partir de 2012 se implementó un proyecto de reemplazo de mobiliario sanitario que ha permitido sustituir 90% de los inodoros de la IBERO (347) por otros de ahorro de agua limitados a 4,5 litros por descarga.   

Asimismo, se reemplazaron 163 mingitorios por otros ahorradores de agua limitados a 0.5 litro por descarga, equivalente al 92% de los mingitorios de la universidad. Además, durante los últimos 10 años se han reemplazado todos los grifos del lavamanos por grifos automáticos con un tiempo corto de activación de agua corriente.  

 En otro de los esfuerzos realizados, a partir de 2017 inició un proceso de reconversión paulatina de jardines de especies vegetales de alto consumo de agua y alto mantenimiento por jardines de bajo consumo de agua y mantenimiento. A la fecha se han reconvertido 3,700 m2, con lo que se estima que se han dejado de utilizar casi 23.000 m3 de agua en los últimos 6 años.

Para controlar el agua residual usada regularmente, dado que la Ibero compra el líquido a un tercero, se asegura, mediante análisis mensuales, que su calidad cumpla con los parámetros normados para reutilizarlo en riego de jardines y muebles sanitarios (norma oficial mexicana NOM-003-SEMARNAT-1997).  

Si algún parámetro analizado por laboratorios acreditados resulta por encima de los valores límite, las aguas residuales tratadas no se pueden reutilizar para riego ni sanitarios. Además, se deben hacer análisis adicionales conforme la Norma local NADF-015-AGUA-2009, que regula las descargas de aguas residuales al sistema de alcantarillado.   

Si alguno de los parámetros analizados se mide por encima de los valores límite, las aguas residuales deben tratarse más.  

De esta manera, la Universidad Iberoamericana Ciudad de México ratifica su compromiso de cuidar el medio ambiente. No por nada, a finales de 2023 escalamos una posición, al lugar 13 entre las universidades más sustentables de México. 

Texto: Jorge Cervantes. Fotos: Cortesía de la Dirección de Servicios Generales.

Notas relacionadas:  

• Compromiso Verde: Plan de Acción Climática de la Ibero CDMX
• IBERO asciende entre las universidades más sustentables de México
• IBERO impulsa el reciclaje de residuos electrónicos con ‘Reciclatrón’  
• Un vistazo a los jardines de la Ibero
• ¡Inauguramos oficialmente el Huerto IBERO José de Acosta!
• La IBERO empieza a generar energía eléctrica para autoconsumo