Dr. Guillermo Fernández: 38 años de impulsar las matemáticas en la IBERO

Lun, 10 Jun 2024
“Matemáticas tienen mala fama de ser difíciles para la gran mayoría de la población”, apunta
Resuelven problemas, generan soluciones y se aplican en casi todo, afirma
Son juegos muy divertidos, señala el académico del Departamento de Física y Matemáticas
“Son amor, gozo y pasión, pues con ellas se hacen grandes descubrimientos”, refiere
  • La gran mayoría de la población piensa que las matemáticas son difíciles. Foto: Pixabay

Para el Doctor (Dr.) Guillermo Fernández Anaya, académico del Departamento de Física y Matemáticas de la Universidad Iberoamericana (IBERO), las matemáticas tienen mala fama de ser difíciles para la gran mayoría de la población, y los padres creen que, si sus hijas o hijos las estudian, no van a obtener un trabajo bien pagado, lo cual es todo lo contrario.

El experto en Teoría Matemática del Control y Sistemas Dinámicos en Física e Ingeniería llegó a dar clases a nuestra casa de estudios en 1986. En aquel entonces, los cálculos y las ecuaciones se hacían a mano y no se usaba la calculadora para resolverlos. Actualmente, lleva 38 años como profesor de la IBERO.

En una amena plática sobre la importancia de esta ciencia y su trayectoria como profesor, recuerda que la IBERO era más pequeña, y a diario, podía convivir con antropólogos, filósofos e historiadores, lo que enriquecía mucho el ambiente entre ellos, pues participaban en torneos de ajedrez.

"Ahora hay una gran dependencia de la tecnología, no es que esté mal, pero se abusa mucho de ella. La gente usa para resolver ecuaciones la calculadora, consulta para todo a Google o algún chat inteligente, y ese abuso hace que la gente practique menos matemáticas. No obstante, sigue habiendo gente muy brillante", cuenta.

Por ejemplo, Mauricio Terrones, un exalumno suyo de la carrera de Ingeniería Física egresó de forma sobresaliente de la IBERO, hizo estudios de posgrado con Harry Kroto (Premio Nobel de Química), y ahora se desenvuelve en la nanociencia y la nanotecnología. El Dr. Fernández Anaya le dio varias materias a él y a varias generaciones de la IBERO.

En su experiencia docente, las matemáticas son amor, gozo y pasión, pues con ellas se hacen grandes descubrimientos. Relata que hay matemáticos que han renunciado a premios como el ruso Grigori Perelman, quien rechazó un millón de dólares que el Instituto Clay en Cambridge (Massachusetts, EU) le había otorgado por resolver la conjetura de Poincaré, uno de los siete problemas del Milenio.

Lo que ha faltado, menciona, es que el sistema educativo ha ido en contra de que los niños desarrollen el gusto por las matemáticas, pues en los niveles de educación básica, no las hacen divertidas, no se motiva al alumnado y tampoco se les lleva de la mano para que puedan medir sus habilidades intelectuales en esta ciencia, muy útil para varias carreras.

¿Para qué pueden servir las matemáticas?

Las matemáticas, señala, no están limitadas, pues si tú vas en un auto tienes que medir gasolina. Son juegos muy divertidos que retan la mente de cualquiera y se aplican prácticamente en casi todo: Estadística, Computación, Finanzas, Inteligencia Artificial, Ciencia de Datos, Economía, Ingeniería o Física.

"Estoy por el gozo del conocimiento, lo disfruto mucho, hay áreas donde se pueden ver como un deporte, hay olimpiadas de matemáticas. Pueden ser una herramienta y un lenguaje sumamente poderoso para resolver o prever problemas y generar nuevas soluciones. Es un campo maravilloso y muy disfrutable, el gran problema es que no se saben enseñar, las vuelven algo tedioso y la cultura que tenemos no ayuda, pero en México tenemos talento", concluye.

Texto: Luis Reyes

Fotos: Firefly y Luis Reyes

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