En Estados Unidos la mayoría de las personas migrantes, en particular las indocumentadas de origen mexicano, no tienen acceso a la atención médica, a pesar de pagar sus impuestos, señaló la Dra. Valeria Marina Valle, directora del Departamento de Estudios Internacionales de la IBERO, en la ‘Cátedra México e Italia’, celebrada en la Universidad de Milán-Bicocca.

En la Unión Americana, puntualizó, existe entre las personas migrantes de un alto nivel educativo un reconocimiento acerca de que la salud es un derecho humano, mientras que las de baja escolaridad perciben al acceso a la salud como un privilegio. 

Durante su ponencia ‘Gobernanza multinivel de la migración para el desarrollo sostenible: análisis del acceso a la salud de las personas migrantes en Estados Unidos y México’, dictada en Italia, la docente se concentró en la identificación de aspectos positivos y negativos de la migración en el marco de la gobernanza multinivel y de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

En México, mencionó, “es clara la desconexión que existe entre la normatividad y la garantía real de los derechos de las personas migrantes en su tránsito por el país, especialmente en relación con el acceso al derecho humano a la salud”.

A pesar de esta desconexión, reconoció al programa Ventanillas de Salud como una buena práctica del Estado mexicano, en alianza con clínicas comunitarias y otros actores, al brindar acceso a la salud a personas migrantes en Estados Unidos.

Por su parte, la Dra. Liliana Meza González, coordinadora de la Maestría en Estudios sobre Migración, dio a conocer en su plática intitulada ‘Migración en la Universidad Iberoamericana’, los proyectos para atender a grupos en movilidad en materia migratoria que se tienen en la institución.

Entre los más emblemáticos, enunció al ‘Programa de Asuntos Migratorios’, que “se involucra en diversas acciones de justicia social, como la capacitación para el personal de albergues y el apoyo a personas defensoras de migrantes”.

Un segundo proyecto clave es la ‘Clínica Jurídica Alaíde Foppa para personas Refugiadas’ -creada por la IBERO en colaboración con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR-, que apoya personas refugiadas y en búsqueda de asilo, y capacita al alumnado de la Licenciatura en Derecho en la defensoría y el acompañamiento legal a personas refugiadas o migrantes necesitadas de asistencia jurídica.

Y con las ‘Prácticas Profesionales y Servicio Social del estudiantado de la Licenciatura en Psicología en los Consulados de México en Chicago y Nueva York’, se brinda apoyo emocional a personas migrantes de origen mexicano.

Finalmente, la Maestría en Estudios sobre Migración prepara a mujeres y hombres comprometidos con el bienestar de las poblaciones migrantes, a través de la investigación y generación de proyectos de intervención social. Entre los cursos de este posgrado se incluyen temas de derechos humanos, género y migración, políticas públicas, entre otros.

PRL

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