Para la Universidad Iberoamericana Ciudad de México el 2021 fue un año agridulce. Renovamos completamente nuestros planes de estudio de licenciatura e ingeniería, a la par que se abrieron nuevos cursos y diplomados; y dimos los primeros pasos hacia la presencialidad, con instalaciones adecuadas para enfrentar los retos que la pandemia ha traído consigo y con la motivación total para comenzar el 2022 con nuevos anhelos y metas.

En este calendario que termina, se celebraron los 500 años de la conversión de Ignacio de Loyola, por lo que participó en el Año Ignaciano, un momento para reflexionar sobre el modo en el que nos enfrentamos con los problemas y la oportunidad que representa un evento como la pandemia para renovarnos en todos los sentidos o ir más allá, es decir, transformarnos en nuevas personas para ser esperanza en estos tiempos complicados.

En medio de estas acciones que miran hacia el futuro, no podemos olvidar el lamentable fallecimiento del Dr. Saúl Cuautle Quechol, S. J., quien durante su corto rectorado pudo concretar la implementación de los Planes Manresa y, al mismo tiempo, visualizar cómo debía ser la nueva forma de regir los destinos de la IBERO en medio de una crisis sanitaria que aún se mantiene entre nosotros.

En este contexto, celebramos la llegada del Dr. Luis Arriaga Valenzuela, S. J., quien fue elegido para llevar las riendas de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, en el periodo 2022-2026. Será el 24 de enero del próximo año cuando asuma formalmente el cargo, pero desde ahora ya planteó que la IBERO se mantendrá fiel a su compromiso de servir a México.

Hay que recordar que con el fin de apoyar de manera práctica a la lucha contra la crisis sanitaria, se compró un ultracongelador para almacenar vacunas. De esta forma, se mostró nuevamente la vocación humanista y los proyectos de incidencia de nuestra casa de estudios, cuya directriz es siempre poner sus servicios a la orden de la sociedad.

Bajo este mismo panorama, el Departamento de Salud puso en marcha la Clínica de Obesidad, un espacio para apoyar a los miembros de nuestra comunidad que subieron de peso a consecuencia del confinamiento por el COVID-19. Además, se abrió el Observatorio Materno Infantil (OMI), un sistema de evaluación y monitoreo de indicadores para conocer la situación nutricional y de salud en el país durante la etapa preconcepcional, el embarazo, la lactancia y en la edad infantil (0-12 años).

En cuanto a herramientas enfocadas a la salud, el Departamento de Psicología, con el apoyo del de Educación, Estudios en Ingeniería para la Innovación y la carrera de Ingeniería en Tecnologías de Cómputo y Telecomunicaciones, diseñó y desarrolló Soy Bienestar, una aplicación para enfrenar los distintos estados emocionales y las vicisitudes que se han acentuado durante la pandemia en la salud y estabilidad de las personas. Este proyecto forma parte de la convocatoria IBERO Frente al COVID, una iniciativa que nació en 2020, pero que sigue generando conocimiento e impacto en este año que termina.

En cuanto a las carreras técnicas, la IBERO abrió su séptimo TSU, éste en Producción Audiovisual y Digital, con una propuesta de incidencia académica que ofrece la oportunidad a las y los jóvenes de incorporarse a la educación superior y formar parte de un proyecto incluyente donde la calidad educativa, enfocada en el aspecto práctico, es el eje.

Como parte de las medidas para atender a la Comunidad IBERO, se decidió unificar el servicio de atención psicológica a través de la Clínica de Bienestar Universitario (CBU). De esta manera, además del personal de servicio, administrativo y docente de asignatura y tiempo de la IBERO, las y los alumnos de licenciatura, posgrado, de programas Técnico Superior Universitario (TSU) y de intercambio, que antes eran atendidos por el Centro de Atención Estudiantil Universitaria (CAEU), pueden recibir atención de la CBU.

Además de la parte psicológica, la Clínica de Nutrición y el Centro de Evaluación del Adulto Mayor (CEAM), pertenecientes al Departamento de Salud, mantuvieron la atención de pacientes de forma virtual. Mientras que a nivel religioso y espiritual, siguieron las misas diarias, así como la impartición de cursos en distintas modalidades por parte de la Casa de Meditación, Encuentro y Paz de la IBERO.

Uno de los ejes primordiales de los nuevos planes de estudio es el género, y durante este año fue preponderante su presencia en la Universidad. Como parte de las herramientas para lograr una comunidad más incluyente, se presentó el traductor de lenguaje inclusivo CaDi, una propuesta del Programa de Género e Inclusión y la investigadora de la Universidad de Valencia, Dra. Capitolina Díaz.

Además, este mismo programa de incidencia de la IBERO, en conjunto con otras organizaciones, lanzó la campaña #ContraLaViolenciaPatriarcal, un espacio para identificar las violencias ejercidas hacia distintos grupos sociales. Nuestra institución también se unió a una red universitaria para atender y erradicar la violencia de género, y en favor de la inclusión e igualdad en las entidades universitarias.

La Universidad Iberoamericana también fue parte de la organización de la segunda edición del Premio Ada Byron a la Mujer Tecnóloga, el cual fue otorgado por las instituciones que conforman el Sistema Universitario Jesuita (SUJ). En esta ocasión, el galardón fue entregado a la Dra. Carolina Leyva Inzunza, quien por su labor de investigación y divulgación de la ciencia fue elegida ganadora.

Hablando de ejes, el de la sustentabilidad es esencial en la Iberoamericana. Aquí, se debe destacar la puesta en marcha del Observatorio de Conflictos Socioambientales y del Laboratorio para la Resolución de Conflictos Socioambientales (LRCS), un espacio para reflexionar, generar proyectos y dar consultoría sobre el sector.

En este ámbito, se anunció la apertura de la Clínica Jurídica para la Justicia Ambiental Berta Cáceres, adscrita al Departamento de Derecho, que tendrá el objetivo de formar a estudiantes de derecho con perspectiva de derechos humanos y el compromiso con la defensa de las tierras, los pueblos indígenas y campesinos, y las comunidades locales.

También se celebró el IX Congreso Internacional de Sustentabilidad IBERO (CIS), evento organizado por la Sociedad de Estudiantes de Ingeniería Química de la IBERO, que reunió durante cuatro días a 50 ponentes de distintos países para generar un espacio para escuchar, compartir y discutir sobre la importancia de la sustentabilidad.

Una de las apuestas más importantes de la IBERO es en favor de la Casa Común. Por ello, se unió a la campaña global Race to Zero por un futuro sustentable, que compromete a nuestra institución para convertirse en una universidad con cero emisiones de carbono en el año 2040. Frente a esta meta, en los próximos meses, la Iberoamericana elaborará un plan con las medidas necesarias para alcanzar este objetivo e informar sobre los progresos.

Asimismo, se realizaron diferentes investigaciones y mediciones para conocer el panorama de la educación en el contexto pandémico. De ahí partieron estudios como Educación en contingencia, un análisis pedagógico, psicológico y tecnológico; la investigación ¿Qué aprendimos durante la pandemia?, una evaluación sobre los contenidos educativos; y El futuro incierto de la educación privada, un estudio sobre el impacto en este sector.

Aunque lanzada el año pasado, la Encuesta sobre los Efectos del COVID-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos, elaborada por el EQUIDE-IBERO, así como su versión para la CDMX, siguieron arrojando datos sobre el impacto de la crisis sanitaria en la población, mismos que han tejido de manera general un esquema de la afectación que amenaza con no detenerse y que, por el contrario, podría agudizarse de acuerdo con las perspectivas de la investigación.

Destaca el lanzamiento de la Plataforma Ciudadana de Fosas, iniciativa en la que participó el Programa de Derechos Humanos de la IBERO junto con otras organizaciones civiles y académicas, en la que se da continuidad a informes sobre las inhumaciones clandestinas, así como un modelo de predicción de hallazgos de fosas. En este espacio es posible consultar información de manera interactiva y en formatos abiertos, lo que permite que sea usado por investigadores(as) y colectivos de búsqueda.

Una de las actividades más importantes fue el ciclo de conferencias Especialistas frente al contexto, un serial que formó parte del Diplomado Análisis Político de la Coyuntura de la Dirección de Educación Continua y el Departamento de Ciencias Sociales y Políticas, cuyo interés fue abrir un canal de diálogo y de discusión sobre algunos de los temas que definieron y marcaron la agenda y el análisis coyuntural de la vida pública en México.

Bajo esta misma temática, la IBERO organizó el ciclo Encuentro y reflexión. Elecciones 2021, una serie de conversaciones en las que se analizó al país desde varias aristas previo al proceso electoral celebrado el 6 de junio de este año. Así, las y los especialistas evaluaron los logros y pendientes del gobierno en el poder. En general, este evento buscó generar datos para lograr un voto informado.

También se lanzó Globalízate, un programa de la IBERO para fomentar la inclusión e igualdad de oportunidades de aprendizaje, así como el desarrollo personal y profesional del estudiantado de excelencia académica, y con pocas posibilidades económicas, para facilitar experiencias internacionales y fortalecer las competencias interculturales sin la necesidad de viajar. Esta iniciativa apoya a estudiantes que por distintas circunstancias no pueden acceder a intercambios académicos.

En este 2021 también se llevó a cabo el Primer Congreso Internacional de Red de Egresados2021 #SomosIBERO en el mundo, un evento cuyo objetivo fue lograr la vinculación con exalumnos(as) de la Universidad, así como compartir experiencias y puntos de vista de personas talentosas que han pasado por nuestra institución, y que están en México y alrededor del mundo detonando cambios que, se pretendem,impactan en el presente y el futuro.

Planes Manresa, una revolución educativa en la IBERO

Uno de los eventos más importantes para la vida académica de la Universidad Iberoamericana fue el lanzamiento de los Planes Manresa, mismos que arrancaron en el semestre Otoño 2021. Con este rediseño que se implementa a nivel licenciatura e ingeniería, la trayectoria de formación social se pone como elemento central.

Además, se pone un mayor énfasis en el conocimiento de la filosofía ignaciana, la inmersión social, es decir, el contacto de las y los estudiantes con la realidad desde los primeros semestres de la carrera; se fortalece el servicio social como mecanismo práctico en campo y la solución de problemáticas sociales de forma teórica y práctica.

Por si fuera poco, todos los planes de estudios estarán cruzados por tres ejes fundamentales para la IBERO: el género, la interculturalidad y la sustentabilidad; y se introdujeron elementos de flexibilidad en el currículum, con el fin de ampliar las materias opcionales y recibir un título adicional al de la licenciatura o ingeniería cursada, lo que avala los conocimientos de las y los estudiantes en otras áreas además de la que eligieron originalmente.

A decir de la Mtra. Sylvia Schmelkes, vicerrectora académica, los Manresa fueron pensados para que las y los estudiantes de la IBERO estén preparados para enfrentar el futuro, ser capaces de responder a los nuevos retos que planteó la pandemia, a partir de una formación interdisciplinaria, social, ciudadana, ética, socioemocional y de promoción del cambio, con una marcada conciencia social y el compromiso con la justicia social y la Casa Común.

En este mismo contexto de búsqueda de nuevos mecanismos que incidan en la mejora educativa, para facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje de docentes y estudiantes a distancia, se implementó el servicio tecnológico de soporte denominado Escritorios Remotos, con el cual, alumnado y profesorado pueden solicitar horas de servicio de cómputo para diversas materias. De esta forma, se mantuvieron de manera eficiente las labores académicas a pesar de la pandemia de COVID-19.

De la mano de este proceso académico y como una acción para buscar la mejora continua y la innovación de la enseñanza-aprendizaje, la IBERO presentó su Índice de Mejora Docente y el Indicador de Rendimiento, cuyo objetivo es evaluar la docencia en la IBERO de manera integral, orientada al desarrollo, a la mejora continua y a la innovación de la práctica docente. La esencia es que cuando ésta mejore, se dará un impacto positivo en los aprendizajes de las y los estudiantes.

Al fin de reconocer la labor docente durante la pandemia, se relanzó el micrositio Voces que Trascienden, en el cual se comparten las experiencias más significativas de académicos y académicas de la IBERO. De esta manera, se cumplió el objetivo de detectar el “enorme talento” que hay en nuestra casa de estudios, hacerlo visible y tenerlo como un ejemplo de lo que se puede hacer.

El regreso esperado

En el mes de agosto comenzó de manera paulatina el regreso a nuestro campus, sobre todo del alumnado que no había tenido la oportunidad de conocer la Universidad a causa de la crisis sanitaria, y de quienes necesitaban usar laboratorios y talleres. También se dio el regreso escalonado de colaboradores(as) administrativos y de servicio, de manera que las actividades se dieran de forma híbrida.

Para ello, la IBERO dispuso de un plan de regreso a la presencialidad que partió de una limpieza profunda y constante higiene de las áreas universitarias; una remodelación en las instalaciones, así como la implementación de mecanismos de ventilación para tener aire limpio circulando en las aulas. Se rediseñaron los espacios abiertos dentro del campus e incluso se estableció un área única para fumadores.

En cuanto a disposiciones generales, se estableció el uso de cubrebocas como obligatorio dentro de la Universidad; una señalética para indicar sentidos de caminabilidad; se dispuso de una plataforma para los viajes en Iberobús; así como la instalación de monitores de temperatura, dispensadores de gel y micas divisoras dentro de cafeterías. Fue esencial la aplicación del Cuestionario de salud, mismo que permitió constatar la salud de nuestra Comunidad antes de entrar al campus.

La IBERO, a través de la Dirección de Educación Continua (DEC), se unió a los esfuerzos de la Iniciativa Spotlight México, proyecto global ejecutado por la ONU y financiado por la Unión Europea, cuyo fin es transformar los factores que reproducen y normalizan la violencia contra las mujeres y niñas en todo el mundo. Además, Educación Continua brindó en la SHCP capacitación en materia de igualdad de género.

Uno de las alianzas más importantes hechas por la DEC fue con Spotify para impartir Periodismo narrativo en podcast, una apuesta para acercar las mejores prácticas del podcast narrativo a estudiantes, profesionales y entusiastas del medio. Durante 10 sesiones, más de 500 personas de distintos países asistieron a este curso formativo en el que participaron especialistas en este ecosistema de comunicación para abordar desde diferentes aristas todo lo referente a los podcast.

En otros ámbitos, la DEC lanzó el curso Atención a la salud mental frente a la pandemia de la COVID-19, con el fin de fomentar la salud mental del personal médico; y firmó una alianza con Calidra, para la formación de cuadros gerenciales de esta importante empresa dedicada a la producción de cal, mezclas listas y carbonatos. Asimismo, renovó el convenio de colaboración entre la IBERO y el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México.

Como un muestra más del enorme calado que tiene su profunda labor educativa, la Universidad Iberoamericana Ciudad de México fue reconocida como una de las 100 instituciones con mejor reputación corporativa en México, de acuerdo con Merco Monitor Empresarial, evaluación global que integra la percepción y valoración de 16 fuentes de información que revisan los méritos de compañías, instituciones o personalidades. A nivel general, la IBERO se posicionó en el lugar 60 y ocupó el segundo casillero en la categoría Educación y Formación.

Al cierre de año, una noticia más alegró a nuestra comunidad: el Comité Mexicano Memoria del Mundo de la UNESCO decidió incluir el Archivo Fotográfico de Mariana Yampolsky en el registro de este programa. Desde 2018, este fondo ha estado bajo resguardo de la Biblioteca Francisco Xavier Clavigero (BFXC) y gracias a su documentación, catalogación e investigación, se han publicado libros con el legado de la prolífica artista.

De esta forma, con el reconocimiento por nuestra labor académica, el compromiso de formar a los profesionales que México y el mundo necesitan, y la misión de servir a nuestro país, cerramos un año más de actividades y nos preparamos para un 2022 en el que consolidaremos una vez más nuestra vocación educativa, con conciencia e incidencia social.

Iván Cabrera/JCM